Catherine en busca del cuclillo tejedor

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Una mañana de esas que el Sol abraza a la tierra con pasión, Catherine salió de casa y caminaba todo el valle de un lado para otro como buscando algo oculto.

Fue curioso escuchar el silbido que salía de su boca, alguien hubiera imaginado que llevaba un canario dentro del bolso.

Al poco rato llegó a un árbol que no ocultaba lo poco que tenía: un nido abandonado.

La madre de Catherine que se había quedado en casa la vio por la ventana y le voceó:

-¡Hijita querida! ¿Qué haces en ese paraje donde solo los cuclillos revolotean?

-¡No te preocupes, mamá -respondió Catherine-, busco al cuclillo tejedor.

-¿Para qué buscas al ave más despiadada con sus hijos?

-Precisamente -continuó Catherine-. Eso es lo que aprovecho, cuando el cuclillo avandone los huevos para que otro pájaro los empolle y los alimente, yo tomaré los huevos…

La llegada de un ave extraño detuvo la conversación. Luego Catherine espantó al ave y luego de tomar los huevos del cuclillo los guardó dentro de su bolso.

Cuando Catherine llegó a su casa, la madre volvió a preocuparse con la actitud de su hija:

-¿Qué vas a hacer ahora con esos huevos?

-Los llevaré al club llamado “Pájaros en estudio”…allí cambiaré los huevos del cuclillo por un canario. ¡Oh, cuánto me gustaría despertar todas las mañanas con el canto del canario!

-¿Estás segura del cambio -preguntó la madre

-Claro que sí -respondió Catherine, y examinando los huevo dentro del bolso agregó: Los cuclillos y sus huéspedes están enzarzados en un proceso evolutivo. -mostrando viejas imágenes de cuclillos con sus pichones-. ¡Por qué la cuclillo ocupa los nidos ajenos echando fuera los huevos que encuentra allí para poner sus propios huevos, abandonán

dolos luego!

-El asombro es mío -siguió la madre-, al ver que mi hija sabe más que yo. -mirando por la ventana-.¿Quieres decir que los cuclillos pronto se acabarán?

-No. -siguió Catherine-, La ave propietaria del nido cuando regresa es quien incuba los huevos de la cuclillo y cuando nacen los pollos los alimenta.

-Interesante ¿verdad? -dijo la madre.

Por eso considero que estos huevos son de gran valor en manos de los científicos. -concluyó Catherine. Luego mientras se vestía para ir al Club de los pájaros en estudio dijo:

-No te preocupes, mamá, no será el canto del Cuco quien nos despierte por la mañana, será el armonioso canto del canario campeón.


Cuclillo tejedor, también conocido como “cuco” espera que otro pájaro construya el nido, empolle sus huevos y alimente a sus crías.

Marah
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