Cielo negro

Y, en la penumbra de tu aurora, recordaras el nombre que alguna vez te hizo respirar de nuevo, nombre que olvidaste por seguir el rumbo ufano del deshielo, arrastrando en primavera con torrente, flores, hierba y letras secas, marchitas ya sin fe, de las profundidades de tu risa estallan, carcajadas que revientan tímpanos de aves muertas, de insectos heréticos, alcohólicos, rodeada estás ahora de ellos, que aconsejan a tu oído vastedades de incoherencias, así, como paloma negra y de ojos rojos de canto falso de sirena, quedarás con aquel nombre feneciendo entre tu pico,con la vista a cielo negro implorando por la impronta ciénaga de donde alguna vez naciste.

 

Agradable la lectura por el tipo de lenguaje utilizado. Un placer leer tu trabajo. Saludos.

 

gracias por la visita y tus amables palabras