Costumbres y anoranzas

No acostumbres tus oídos a escuchar cuanto te aman

ese amor desaparece entre ecos de palabras

acostumbra a tu piel a sentir en enseñanzas

enseñanzas que no olvide si renuncias a mirarle

no acostumbres tus sentidos a vivir en añoranzas

añoranzas que lastiman lo profundo de tu alma

y reviven sentimientos que tu mente olvidaba,

olvidaba que acostumbras sufrir por añoranzas

 

Me he visto en la libertad, espera no se sienta agraviad@ por dicha desfachatez, en pausar su poema… Al menos para mi lectura/asimilación, me han venido de vicio…

Por otra parte, puestos a responder, voy a hacerlo con una suma de ripios que espero no le molesten…

Por si acaso, he de añadir, que su poema, me ha gustado, o añadiría, me ha emocionado, que al final, es el mero fin de toda lírica…


Añoranzas, el eco incombustible

que avitualla a la piel a convivir con las labranzas,

de esas manos pusilánimes que hacen que lo imposible,

proscribe más allá de las herencias de la esperanza…



Añoranzas, lacerantes e invisibles,

fértiles incluso cuando quieto, avanzas…

axioma de días esquivos inconsútiles…

la vida es un río que muere en la mar de la añoranza…

 

No comparto la idea de similitud, ya que el mensaje es totalmente diferente, pero respeto su opinión y agradezco se haya detenido a leer mis lineas, un abrazo...