Crónica de un suicidio fallido

CRÓNICA DE UN SUICIDIO FALLIDO


Dedicado a Mario y a Daniel

I​

Y un día sucede, por fin, lo que tantos temían, te da rabia mental y simplemente el cerebro se ahoga en una mezcla poco ortodoxa de vodka tonic, cerveza oscura de barril y nieve de tequila. Sales del bar dando tumbos por la calle, sin rumbo alguno, pero con la idea fija de que te asalten o te maten al caminar por la ciudad de noche ( es el juego de la ruleta rusa al chilango style).
De entre el alcohol surgen las calles oscuras y la promesa de la muerte liberadora, calles entre Tlalpan, División del Norte y Miguel Ángel de Quevedo. Si de plano no me pasa nada es que o tengo mucha pinche suerte o estoy tan jodido que ni un pinche ratero se acerca, pienso mientras cruzo Miguel Ángel sin fijarme en los coches que vienen a toda velocidad desde Taxqueña, si te atropella un vocho viejo, te paras y te arrastras al coche que sigue, si vamos a morir atropellados que sea por alguien menos jodido que tú, me dice el suicida que se ha hecho cargo de dirigir la caminata nocturna.
¡Pinche luna¡ ¿Dónde estás?
Me aviento contra los carteles de vidrio de los parabuses y compruebo su resistencia y mi inutilidad como vándalo o porro, al parecer nomás no tengo el don destructivo. Camino zigzagueando de lado a lado de la avenida y no, nada ni un pinche cristiano que se anime a centrarme con su nave.
Veo en la bruma vaporosa de mi embriaguez un teléfono a lo lejos, dudo si tratar de arrancarlo o llamar al pasado, dado mi fallido experimento del cristal, opto por buscar mi tarjeta telefónica y a pesar de mis esfuerzos por olvidar el número, el suicida marca atinadamente, mientras dulcemente dice: ojalá te conteste su novio, el metro no esta lejos y no estaría mal un clavado a las vías.
Dos timbrazos, una voz femenina que contesta, a lo lejos mi cordura cree identificarla, la confunde en el estupor con ELLA, pero es su hermana la que habla. Me platica de su nueva vida, de la hija próxima a nacer, cosa de un día o dos, a lo lejos recuerdo un viejo sueño antaño preciado, hoy olvidado: una hija, el amor, una vida para dos, sueños rotos.
Le dije que esa niña a gandalla ha de enseñar, hablo con el padre y le pido cuide de ellas, mi recomendación no solo es hacia su nueva familia sino A ELLA QUE YA NO ESTA CONMIGO y a su mamá.
Es mucha la emotividad, la cursilería o la peda, el caso es que María Magdalena es una pendeja si de llorar se trata en un teléfono público, a lo lejos escucho algo acerca de ir a conocer a la niña, el suicida grita desde adentro que sería mejor que esa niña jamás nos conociera si un buen hado ha de iluminar su vida. Cuelgo y sigo caminando, abrazado a mi, al suicida, al alcohol, al dolor. Recuerda que renunciaste a cualquier papel en su vida, me recuerda el suicida para aumentar este sentimiento de vacío, pero no importa lo que diga, la calle es oscura y yo dando tumbos espero encontrarme a quien me libre de mi, ya sea de un piquete de desarmador o el disparo de una calibre 22, por los míseros 20 varos que cargo en la cartera.

II
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Cruzo otra avenida con los ojos aún llorosos, desemboco a otra calle sin nombre, el suicida me dice: [B][FONT=Times New Roman]búscate una vinata que ya hace falta combustible para continuar con esta peregrinación hacia el infierno.[/FONT][/B][FONT=Times New Roman][/font]
[FONT=Times New Roman][SIZE=4]De la oscuridad de la noche surge un parque y en el se dibuja el contorno nebuloso de una pequeña iglesia, contengo las lágrimas y la rabia se desata de su prisión para proclamar una amenaza al vacío edificio:[/SIZE]
[SIZE=4][I][FONT=Times New Roman]¡ Ni creas que frente a ti una lágrima voy a derramar![/FONT][/I][FONT=Times New Roman][/font][/SIZE][FONT=Times New Roman]
[FONT=Times New Roman][SIZE=4]El suicida organiza la ola y se pasea con la matraca por las tribunas de mi mente.[/SIZE]
[FONT=Times New Roman][SIZE=4]En vez de seguir derecho, doblo hacia la izquierda y aparezco en División del Norte. ¿ Y ahora pa dónde? Le pregunto al suicida.[/SIZE]
[FONT=Times New Roman][B][SIZE=4]Vamos rumbo a Tlalpan, chance por allá se encuentre una linda sorpresa navideña.[/SIZE][/B]
[FONT=Times New Roman][SIZE=4]No necesito más argumentos y me lanzo por en medio del camellón bajo las torres de alta tensión, tal vez por aquí sí.[/SIZE]
[FONT=Times New Roman][SIZE=4]Nadie se acerca o se cruza en mi camino, los pocos despistados que aún deambulan se apartan de mi sendero, después de un rato, con los zapatos llenos de tierra, llegó a Tlalpan y veo el tráfico dominical recorrer la calzada, pero algo no esta bien, he llegado indemne, ni un pinche rasguño. ¿Me subo a una micro para llegar a la casa y dejar esta estupidez o que otro plan infalible tienes en mente? Le pregunto al suicida, a lo cual responde sumamente contrariado y encabronado:[/SIZE]
[FONT=Times New Roman][B][SIZE=4]¡Ahora me cumples y nos morimos o me dejas como estaba![/SIZE][/B]
[SIZE=4][FONT=Times New Roman]Mientras veo la vida correr tras el tiempo, el suicida elabora un nuevo plan, mientras se decide camino rumbo a la estación del tren ligero de Ciudad Jardín, al hacerlo recuerdo otra estación del tren ligero, la de la Noria, allá por Xochimilco. Esa estación en particular me gusta, trae a mi la sensación de lejanía, de un esperar en el anden mientras contemplo las vías del tren, a lo lejos los cerros y el irse de la gente y de los recuerdos. Ingenuamente pienso que ese es su plan, pero no. [FONT=Times New Roman][B]Ahora nos vamos por acá. [/B][FONT=Times New Roman]Y al escucharlo, veo marcar la dirección, mi destino: los oscuros y sombríos jardines que separan Tlalpan de División del Norte. [FONT=Times New Roman][B]A fuerzas algún pinche teporocho ha de andar por allí escondido, sediento y con ganas de darte un piquete para sufragar su vicio.[/B][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/SIZE][FONT=Times New Roman][FONT=Times New Roman][FONT=Times New Roman][FONT=Times New Roman]
[FONT=Times New Roman][SIZE=4]Gustoso por complacerlo inicio la marcha por en medio de las canchas de basquetball sin luz, escuchando el crujir de las hojas secas bajo mis pies, en un momento de debilidad recojo un pedazo de madera en forma de estaca, adecuado para matar vampiros y demás seres de la noche en una película del Santo.[/SIZE]
[FONT=Times New Roman][B][SIZE=4]Eso es todo, si no te chinga un ladrón te apaña la ley y te madrea.[/SIZE][/B]
[SIZE=4][FONT=Times New Roman][B]Sigo caminado alrededor del edificio de bombas que se encuentra junto a División del Norte y aún nada, doy vuelta a la izquierda y desemboco a una calle donde ni un alma se asoma, el suicida empieza a desesperarse y repasa su plan para ver en que ha fallado. En lo que maquina una nueva ruta la calle se acaba en una reja, mi primer impulso es escalar la alambrada, pero una cosa es estar pedo y otra estar pendejo. Doy la vuelta y regreso sobre mis pasos rumbo a División, de repente una oportunidad para el suicida, el guardián de la caseta de la entrada, despierta de su estupor dominguero y me observa en lo que lentamente me acerco a la caseta, paso junto a él, esperando escuchar su voz preguntarme mi destino, una identificación y al hacerlo vea la estaca que en mi brazo oculta la chamarra. El suicida expectante espera el desenlace, se cree en final de fútbol en tiempo extra, cobrando un penal, el cual decidirá mi suerte, guarda silencio y se prepara para gritar y festejar su gol, mi caída, cuando el guardia abre la boca y me dice:[/B][/FONT][/SIZE][FONT=Times New Roman]

[SIZE=4][B][FONT=Times New Roman]Buenas noches.[/FONT][/B][FONT=Times New Roman][/font][/SIZE][FONT=Times New Roman]

[SIZE=4][B][FONT=Times New Roman]El suicida se jala los pelos, grita exigiendo juego sucio, su tiro se fue hacia la tribuna y yo salgo hacia División.[/FONT][/B][FONT=Times New Roman][/font][/SIZE][FONT=Times New Roman]

[SIZE=4][B][FONT=Times New Roman]Encabronado intenta un último recurso, [/FONT][/B][FONT=Times New Roman][FONT=Times New Roman]De esta no te salva ni el pinche Juan Diego que no existe.[/FONT][/font][/SIZE][FONT=Times New Roman][FONT=Times New Roman]


[CENTER][SIZE=4][B][FONT=Times New Roman]III[/FONT][/B][FONT=Times New Roman][/font][/SIZE][FONT=Times New Roman][/font][/CENTER][FONT=Times New Roman]

[SIZE=4][B][FONT=Times New Roman]Supongo que su plan radica en que yo camine por sobre el carril central de División del Norte, pero no es así, encamina mis pasos a un viejo camino, que si de día era un peligro transitar por allí, de noche, supone el suicida, no tendré escape alguno. [/FONT][/B][FONT=Times New Roman][FONT=Times New Roman]Ahora vamos a ver si es verdad eso que dices: hierba mala nunca muere, por lo pronto subes al Anahuacalli, bajas por el Asturiano y por último alcanzas Tlalpan, si no pasa nada, pues has ganado, pero esta muy cabrón que pierda el día de hoy, confió en los vándalos y pandilleros de estos lares para dejarte tieso.[/FONT][/font][/SIZE][FONT=Times New Roman][FONT=Times New Roman]

[SIZE=4][B][FONT=Times New Roman]Acepto el reto e inicio el ascenso, lo que no recuerda el suicida es que antaño al recorrer esa misma ruta, fui de los pocos que jamás fueron asaltados por los chavos banda del rumbo. Amparado por ese recuerdo, subo y cruzo calles oscuras, veo las barriadas con sus paredes graffiteadas, tiendas con música de los “Tucanes” o el “Tri”, veo a los chavos chupar sus caguamas en las banquetas, trato de bloquear mi miedo, pero clarito siento sus miradas sobre mi, lo único que atino a realizar es apretar la estaca en mi brazo y me preparo para un posible asalto.[/FONT][/B][FONT=Times New Roman][/font][/SIZE][FONT=Times New Roman]

[SIZE=4][B][FONT=Times New Roman]El suicida ríe maliciosamente y espera el ataque de la jauría. Desconozco la razón o el motivo de muchas de los sucesos que acontecen en este universo paralelo llamado D.F., el caso es que paso indemne y sin ninguna molestia, al fin llego al oscuro edificio y me preparo para el descenso. El suicida echa espuma por la boca, no puede creerlo, yo si, tal vez los chavos pensaron que solo alguien más loco que ellos se atrevería a caminar por esos rumbos a esas horas.[/FONT][/B][FONT=Times New Roman][/font][/SIZE][FONT=Times New Roman]

[SIZE=4][B][FONT=Times New Roman]Estoy a punto de vencer al suicida cuando veo una Suburban llena de granaderos dando la vuelta, intuyo que al verme caminando por allí y dada mi negra indumentaria, su malsana curiosidad despertara y se acercaran, no tengo tiempo para tirar la estaca, pues estoy tan cerca que sería obvio, correr es una pendejada, por lo tanto deduzco que estoy atrapado, después de todo el suicida ha ganado, lo escucho otra vez organizar la ola y una porra por los bienaventurados granaderos, los cuales son un regalo del Dios de los suicidas.[/FONT][/B][FONT=Times New Roman][/font][/SIZE][FONT=Times New Roman]

[SIZE=4][B][FONT=Times New Roman]Por otro lado supongo que algún Dios pagano en su rato de ociosidad dominguera ha decidido mi suerte, eso o es el espíritu de Diego Rivera el cual me hace el paro,[/FONT][/B][FONT=Times New Roman][/font][/SIZE][FONT=Times New Roman]

[SIZE=4][B][FONT=Times New Roman]Pues ese día nomás no iba ser mi velorio.[/FONT][/B][FONT=Times New Roman][/font][/SIZE][FONT=Times New Roman]

[SIZE=4][B][FONT=Times New Roman]La camioneta de granaderos da la vuelta en redondo y se pierde rumbo a División. El suicida trata en vano: ¡ [/FONT][/B][FONT=Times New Roman][FONT=Times New Roman]Putos tiras, vuelvan acá y líbrenme de este cabrón![B] Pero ya estaba decidido, una vez más había vencido al suicida, a unas cuadras de allí estaba la casa de un tío, necesitaba un lugar al cual llegar para aliviarme un poco esta borrachera y la infructuosa caminata del suicida. Él al parecer se dio por vencido y se dio cuenta que simplemente esa noche no sería cuando yo muriera.[/B][/FONT][/font][/SIZE][FONT=Times New Roman][FONT=Times New Roman][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/FONT][/FONT][/font][/font][/font][/font][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/font][/FONT]

 

Solo te recomiendo evitar las maldiciones, o buscar una manera de decir lo que buscas sin ellas, ya que da mejor sentido, y es mas agradable al oido.