Deduciendo la soledad

Una vez me dijeron que la soledad es algo
que podemos manejar.
Y ante semejante idiotez
no me quedó otra que responder con la única ecuación
que conozco; la de restar la vida
en las tardes multiplicadas
por las largas semanas del silencio.
Verdaderamente, no hay claridad
que se perciba detrás de las cortinas
de este anfiteatro conocido como “el mundo”
donde payasos, títeres, mimos, malabaristas, monos
y hasta el dueño del circo
ven pasar las horas
como si fueran invidentes jugando un tonto juego
de quién cuenta más baldosas.
Entonces, para no sentirnos tan miserables,
amontonamos las cosas, formamos un pilón
de objetos materiales con la esperanza
que nos den un poco de vacante afecto.
Y nos acomodamos en un rincón para contemplarlo,
detrás de ese paisaje
que por necios no queremos conocer, hasta que,
finalmente, la soledad corta la soga
de los últimos horcados en la tarde
y el silencio
se vuelve un digno sepulcro, una fosa común
de entendimiento
que nos guiña su agudo ojo
.............................desde toda la eternidad.

 

Hola Danie, me ha gustado tu reflexión, has hecho un cóctel con la "Soledad, el Silencio, los Miserables avariciosos, los Necios materialistas, los faltos de afecto, que se lo niegan ellos mismos y solo les preocupa acaparar más y más riqueza material, y dejan pasar la vida quedándose solamente en eso, sin vivir realmente, pues al final nadie se salva y todos, ricos y pobres, en lo material y espiritual también, se juntan para siempre y desde siempre en el más absoluto silencio y soledad, sin nada más que eso, por mucho que hayan acaparado. La soledad nos maneja a su antojo y no sabemos el porqué de sentir soledad cuando estamos rodeados de gente y en otras ocasiones sentir que no estamos solos, cuando estamos rodeados de soledad". Quién lo puede explicar?... yo no lo se, puede ser el estado de ánimo?, no lo se. ( Tampoco se si es lo que querías trasmitir con tu poema, a mi me ha hecho elucubrar así...).
Un abrazo Danie. José Ignacio.

 

Amo la soledad, diría que la ansío. Está claro que son pocos los momentos en los que puedo disfrutarla y es por eso, por ese afán que tenemos los humanos de querer lo que no tenemos. Estoy segura de que si tuviera muchos momentos de soledad, estaría deseando de estar en compañía...
En tu poema veo otro tipo de soledad, la que uno siente cuando observa el paso del tiempo, un tiempo que viaja a la velocidad del sonido, un tiempo que ayer fue prehistoria y hoy es odisea en el espacio, un tiempo que no se sostiene con la lógica humana porque cada vez hay menos lógica y menos capacidad humana. La soledad se inquieta en esta silla, necesita de un sofá y un buen libro, tu soledad está ahogada, está perdida...

Una delicia elucubrar con tu puesta en escena.

Abrazos!

Palmira

 

Me ha gustado este poema, porque reconoce que somos vulnerables.

 

verdaderamente, es que ni yo me acuerdo lo que quise en su tiempo transmitir amigo, jajaja es sobre algo que me dijeron de soledad, como digo la poesía tiene esas cosas. Creo que trata de que somos vulnerables. Jajaaj… eso dice Mommo, y en eso tiene razón.

Gracias por pasar y comentar, y por cierto, perdona en la demora.


Un abrazo grande.

 

la delicia es toda mía al disfrutar de tu inmensa presencia, amiga.
Como verás, a veces me pierdo y no respondo, pero no significa que no agradezca las lecturas... qué sería de los textos sin ellas?
siempre hay que agradecer, agradecido por siempre y más con lectoras y poetisas como vos.

un abrazo grande, Palmira.

 

Sí somos frágiles y es imposible que arreglemos todo lo que hacemos mal. porque somos vulnerables como dices.
gracias por tu paso Nommo.

Un abrazo grande.

 

No hay problema Danie, eso también me pasa a mi. Gracias por responder aún a sabiendas de que no sabías el qué. Yo creo que esa ha sido la mejor respuesta que he recibido, te hace pensar y reflexionar sobre por qué Nommo está en todas partes como dios, y es el único que en nuestra vulnerabilidad nos puede proteger. jajajaja ... Nommo no te me enfades que te quiero mucho, no deja de ser una simple chanza sobre la existencia de algo que no sabemos que es, solo lo intuimos, quien lo intuya...

Un abrazo Danie.