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Déjalo

Tema en 'Prosa: Generales' comenzado por Jose Anibal Ortiz Lozada, 16 de Abril de 2025. Respuestas: 0 | Visitas: 41

  1. Jose Anibal Ortiz Lozada

    Jose Anibal Ortiz Lozada Poeta adicto al portal

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    Déjalo.
    Que escriba aunque se le caigan los párpados de tanto mirar hacia adentro, aunque la noche le cierre la garganta y la palabra se arrastre como un animal herido.

    Hay cuerpos que sólo se redimen al escribir su herida, y él ha hecho del lenguaje su catarsis, su acto de resistencia ante el olvido.

    Déjalo.
    Que escriba con los dedos manchados de infancia, con el aliento de quien ha besado la ausencia hasta confundirse con ella.
    Déjalo hablar con la lengua de las cicatrices, de los relojes que se detienen en el exacto segundo de un nombre no dicho.

    Que escriba, porque escribir es su manera de no morir del todo.
    Su modo de amarrarse a las ruinas
    como quien siembra flores en un campo minado.
    No escribe para gustar ni para entenderse, escribe para que el silencio no se lo trague.

    Y si se repite, si a veces gime con las mismas letras, es porque hay dolores que no caben en una sola frase,
    y hay versos que necesitan reincidir,
    como las olas: para no olvidar el mar.

    Déjalo.
    Que escriba con la voz temblorosa del que ama demasiado, del que ya no espera nada pero igual se desangra en cada palabra
    por si alguien—por si tú—alguna vez lo escucha.

    Déjalo.
    Que escriba aunque le tiemble la voz en las sílabas, aunque el papel sangre por las esquinas.

    Déjalo.
    Que escriba con los huesos, con la lengua rota de callar tanto. Que escriba como quien escarba en la tierra buscando un grito. Porque hay días en que la tinta no basta,
    y los espejos no devuelven más que la ausencia.

    Hay palabras que duelen como una madre muerta, y él, pequeño dios de su propia ruina, solo quiere dejar constancia de su naufragio.

    Déjalo.
    Que escriba como quien se arranca la piel con una pluma, como quien se ofrece en sacrificio a la palabra.
    Él no busca belleza, ni perdón,
    solo el eco. Solo un poco de sombra que lo contenga.

    Porque escribir es arder en silencio
    y él ya está acostumbrado al fuego
     
    #1

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