Déjame soñar...

Déjame soñar…

Déjame soñar…
con aquella Semana Santa
cuando nuestras miradas se cruzaron
al paso de Jesús crucificado.

Déjame soñar con aquel día…
cuando bebimos de tus manos
del manantial puro y cristalino
que guarda San Luís divino.

Déjame escuchar el ritmo acompasado
de nuestros corazones latiendo,
del abrazo enamorado y sincero
cuando nos dijimos te quiero.

Déjame soñar…
con aquella hermosa primavera
caminando de la mano ilusionados
hasta la fuente cantarina de “la Teja”,
testigo del amor que nos juramos.

Déjame seguir soñando…
¡No me interrumpas, no digas nada!,
quiero verme en sus ojos emocionados
el día de nuestra boda.

Y en este amanecer sereno
necesito seguir soñando…
aunque sepa que mi barca
quedó varada en aquel invierno.

¿Volveré a verte algún día?
¡Quién sabe!, Te esperaré
en el sitio que un milagro
me hizo conocerte ayer.

Fina Simón

 

Muchas gracias querida Maramín por dejarme su cálida huella...
Un fuerte abrazo.

 

El mundo nos impide a veces soñar, pero en nuestro corazón sigue la ilusión viva,
mi respeto en un abrazo de colores,

 

Guadalupe Cisneros muchas gracias por dejarme su cálida huella...
Un abrazo y cuídese mucho.

 

Bello y melancólico poema nos regalas Fina. Nunca dejes de soñar , los sueños y la esperanza nos mantienen vivos. Un gran abrazo.

 

Muchas gracias querida Master por dejar en mi humilde versar la cálida huella de su paso...
Un fuerte abrazo y feliz domingo.