(Des) Confianza

- Me tienes harto con tus celos, ¿Por qué no tenés un poco de amor propio y te das cuenta de que yo te quiero solo a vos?.
Ella lo miro con esos ojitos que pone un cachorro cuando escucha que le gritas, la luna amante de los chismes quedó atenta a la escena, un árbol quedó frio al escuchar ese tono de voz con el que ella le dijo esas palabras y el hornero salió de su casa pues se armó una novela.
- No es cuestión de enojarse o no enojarse, yo te amo y tengo miedo de que me lastimes y volver a vivir la misma escena. Me han lastimado bastante.
- Lo entiendo, pero te has puesto a pensar que el solo hecho de sentir celos es llamar infiel, perro o perra a tu pareja, dependiendo de quien lo diga a quien. Los celos son inseguridades y acepto que tengas miedo.
Pero no me comparés con ellos, yo te elegí y me elegiste. Si me crees capaz de engañarte entonces no has aprendido de tus errores y no sabes entender que mi amor es solo tuyo.
- Lo sé, lamento mucho sentir estos celos. Te quiero. Solo dame seguridad.
Callados en medio de la noche con su contaminación auditiva se quedan los dos mirándose. Ella no confía en él pero elige poner paños frios para no pelear. Él la quiere pero está a unos pasos de acabar la relación pues está cansado de los celos.
- ¿Quién crees que tiene la razón? Le pregunta el árbol al hornero
- Depende de la perspectiva.
- Explícame, dijo el árbol
- Muy simple. Ella tiene derecho a desconfiar pero si no está segura no está lista aún para una relación. Él tiene derecho a ofenderse, pero si no lucha por el amor de ella no está listo aún para una relación. Para ser más claros. Si no luchan éste es el final.
- ¿Tú crees que deberían luchar?
- A mí qué me preguntas yo soy solo un pájaro.
Los dos quedan abrazados, se toman de las manos. Han decidido luchar.