Descansar de fumar.

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En la mirada lleva ceñido un amuleto como una confusa premonición que haría retroceder al más osado, en su mente un hueco. La claridad del día se acerca como el vapor, algo se remueve en sus pulmones, de sobra sabe que este amanecer será imposible para él, que nada más le cabe en ese hueco. No quiere pensar, no desea rendir cuentas, ni descansar de fumar.
Y así le fueron las cosas. Enciende un cigarrillo porque estaba sobre la mesa el paquete y lo ha visto, eso es todo. Echa mucho humo por la boca, es el aliento del suicida que sabe desfallecer.
El suspiro de las últimas caladas recogido en el azogue; nada se mueve, nada salvo la soga que balancea en la cúpula de humo sobre el vertedero de no entender. Se aúpa hacia el desastre, abandona el cigarro, se despide de lo podrido, brincando de la silla ensaya ser pájaro y se va asfixiando con la malla del humo. Se siente flotar entre los restos que vienen de las conjugaciones del silencio y desde el silencio ambiciona caer al suelo pero patalea hacia el cielo de cómo dejar de pensar.
Caer, volar, morir... y en la mirada de cristal se distingue un ligero matiz, sus ojos segregan savia y sabía, la nostalgia acaso de la calada perdida, ya lo decía su amuleto.

 

Engel
Pienso en el hombre que sabe que ese cigarrillo que reposa frente a sí es lo mismo que una porción de cianuro y sin embargo lo fuma, lo saborea, mientras lo conduce a la muerte.
Interesante tu prosa que engancha de principio a fin
Felicitaciones y saludos
Ana

 

Da para mucho tu relato, muy triste también, muchos son más fieles al cigarillo que a su mujer, es decir pueden dejar todo, todo...menos el mortal vicio. en este caso tu personaje, no quería esperar la muerte si no que el la buscaba,
bueno, todo fumador la busca,pero este quueria acortar el tiempo de espera.

Un gusto leerte, te dejo una de mis obras que tratan el tema.

Un beso


Muerte Lenta/ Colografía collage

 

Un placer contar con tu visita Cisne.
Gracias por dejar tu punto de vista. Un abrazo querida amiga.

 

Gracias Sheyla, interesante contar con tu opinión. Me alegra que la prosa haya resultado de tu agrado.
El cuadro es precioso y muy expresivo, desconocía la técnica de lo colografía.
Fuerte abrazo.

 

No recordaba haberte leído en este foro.

Describes una realidad por la que no pasa el tiempo. Son muchos los modos en los que arriesgamos la salud. Unos físicos, otros mentales... con o sin conciencia...
El mensaje subliminal está muy logrado.
Te felicito Engel, siempre tocas fibras.

Abrazos

 

Gracias, Palmira. Quedo encantado con tu visita. Mi gracias por desempolvar esta prosa.
Abrazos...