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Desde ese día

Tema en 'Poemas de Amor' comenzado por mert ekert, 25 de Enero de 2017. Respuestas: 1 | Visitas: 389

  1. mert ekert

    mert ekert Poeta recién llegado

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    Escucho el viento agonizar al susurrar tu nombre sobre la tormenta,

    veo el rayo caer ante la sonrisa,

    disfrutas la savia de las espinas

    y devoras los pétalos de la inocencia para alimenta los sueños.


    Retumban tus pasos en la estéril vida del sonido,

    cortando la caída en el sendero de los murmullos;

    el silencio es penitente

    en nuestra soledad.


    Camino dentro de un dolor que ha decorado el brillo de tu naturaleza,

    contemplo cambiar del éxtasis de muerte,

    abriendo las puertas a la luna, brindando con la sangre

    en la noche de eterna promesa de vida.


    Observo los amaneceres rojos,

    que dan la esperanza de agonizar en el umbral de pasión,

    en las flores de los temores

    brindamos con las almas y el néctar de los pecadores caídos.


    Callamos al sol con su resplandor hiriente

    y los días se vuelven viento del desierto,

    donde nos evaporamos en el silencio del ocaso,

    por la ventana observas la arena detener el odio de la creación.


    La madre nocturna otorga el fruto pecador

    para subsistir en el trayecto del anochecer,

    las aves dan las penumbras en su hermoso canto,

    donde danzan las sombras de nuestros nombres.


    Cuestionamos las lágrimas, los caminos, las rocas y las raíces de hielo,

    que responden con sus gritos de negación,

    encontramos rota la copa de nuestras almas

    y veo alejarse las hojas del moribundo árbol en los pasos de las horas.


    Las mariposas se alimentan con el néctar de la sinceridad,

    mueren en el viaje nocturno de los ángeles caídos,

    que nos observan desde la altura

    sonriendo en el reflejo del lago de nuestros ojos.


    Imploro derramando una lágrima al luto que carga mi mente,

    para que termine esta alucinación de perder la razón al sentir tu aliento,

    para que liberes la búsqueda incesante de tu obscuridad,

    ya que mi amor vivirá en el brillo del corazón.


    Los sueños son limpios entre las manos de la virginidad,

    cavamos las pesadillas con las garras de la arpías,

    sepultamos las dulces frases en el cementerio

    de los justos amantes.


    Aún siento en mis latidos el amor inocente,

    desde ese día recuerdo que no he podido escapar de ti,

    aunque brille la luz del anochecer

    con la mirada frente al horizonte de la ilusión.


    Son para ti las notas de la luna

    y para ti los cantico de la noche,

    he volado al nido de nuestros primeros besos,

    ya solo importa las espinas entre nuestros abrazos.


    MERT EKERT
     
    #1
    A Paco Valiente le gusta esto.
  2. Paco Valiente

    Paco Valiente Poeta que no puede vivir sin el portal

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    La dualidad de la vida en un certero y bello poema de amor. Un abrazo amigo mert. Paco.
     
    #2

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