Dia 45,...Las escaleras del metro.

Ahora si, oidme ciudadanos, gentes sencillas de a pié, aquí y ahora, en este mismo momento, en este instante os lo voy a revelar, no me hace falta otro lugar este sitio es el idóneo, con ustedes delante no debo esperar más, oiganme todos, La Resistencia ha llegado, ciudadanos, que no les engañen.-De pronto el bufón activó una palanca y desde detrás de su espalda apareció una réplica de el, vestido igual que él y hasta del mismo tamaño que él, una marioneta de gomaespuma que con su mano izquierda manipulaba y hablaba y gesticulaba igual él, ahora el bufón parecía que abarcaba mas espacio y se dirigía, al cada vez mas numeroso público, de una manera más embaucadora.-Ciudadanos que no os engañen, una vida son dos vidas, la que mostramos, la que se ve, la que usted ve en él, y usted en él y usted en aquel otro y usted también en él y en él y en él y todos en todos, pero no podemos olvidar a la otra, la de los sueños, una tercera parte de nuestras vidas que pocos dejan ver porque está cada vez más perseguida. Créanme, sus dos vidas son como las escaleras del metro, la mecánica y la fija la de peldaños de cemento, viven pegadas, paralelas, la primera vuela, la segunda es mas lenta, pero ambas inseparables, ambas dos alcanzan la luz, ambas llevan a la meta.- de nuevo el botón y el bufón ocultó a su gemelo, y adelantando tres pasos su mensaje, casi desafiante, prosiguió solo a cara descubirta.- Debéis conseguir que la vida de vuestros sueños os acompañe siempre, que os ayude más en la que mostrais, debéis dejarla pronunciarse mas en vuestras actitudes, ciudadanos, paseadla, que camine a vuestro lado, que no os la silencien.- De nuevo activó la palanca y la marioneta a derecha e izquierda decia.- Venid a mi, acercaos, que yo soy La Resistencia y soy capaz de verla y oirla, acercaos ciudadanos, gentes sencilla de a pié, enseñádmela que yo soy La Resistencia.- y de pronto unas sirenas atronadoras provocaron una espantá, la gente corria despavorida, eran bomberos gregarios quemando con lanzallamas las vidas de gomaespuma.

 

No creo que nadie nos cubra, nuestra única mentira es creer que hay una verdad, y que está en los sueños,
resistir que?, la gente no quiere resistir,
la gente quiere techo en las estaciones del metro en verano. Hay que tener cuidado con eso de resistir, porque en algún momento nos terminaremos resistiendo a nosotros mismos, y ni siquiera lo creeremos.

 

Oh, Valerie, me interesan tus palabras, quizás desde la resistencia, si nos lo permites la usemos, citandote por supuesto. Gracias por regalarnos la voz de oro de la capital real, otra guerrillera de la resistencia, mi querida, Ros Serey.