Dia 61,...Vertientes del amor. La vela encendida.

No puedes ser el hombre de mi vida, porque ahora soy la mujer de la mia, se que una parte se me fué con el suicida, en la que queda aunque vacía guardo una vela encendida.
No puedes ser espejo y no me quejo, verte de cerca me confirma que estas lejos, de puerta en puerta sin hacer mucho ruido vas robándole a cupido y ya no aguanto tus excesos.
Y no hace falta por pasiva que te diga, que no es que salga por las noches y te persiga yo me estoy quieta, pero tú te mueves mucho, y ya no pierdo porque ni siquiera lucho, ya no me escuecen las heridas con la sal de tus lágrimas finjidas, y en tu mentira bailo tregua y catala.
No puedes ser presente de un favor ni el resultado de un conjuro de amor, por no tener, ni unos buenos argumentos, que en tu edén se está un momento y mi pasión fué compasión.
Y no te atrevas a acordarte que nací, ya no tengo marcas ni huellas que a ti te hagan pensar cuando me veas que yo fuí, las cadenas del pasado las rompí, y ya no soy la mujer de tu vida, guardo una vela encendida y ahora soy, la mujer de la mia.
Y si llego al infierno antes que tu, arderé en las llamas de la hoguera por negar, que en su dia en este cuerpo di cobijo a la sangre de tus hijos, asi que ahora me voy y ni te atrevas a tocarme, me tendría que duchar.

 

Impresionante desahogo de un alma rota. Una perspectiva femenina encajada como un guante.
Felicidades por esta vertiente.
Un abrazo,

Palmira