Diario de un marciano (ii)

"Por la metrópolis"



FEBRERO, AÑO 2087

22: 10 : Tras un viaje de más de 2400 segundos, la nave llega a mi rumbo, el paisaje desolador anterior comparado con lo que veo en este instante, sería un atardecer sideral con un arcoiris en forma de estrella...

22: 11 : Hay varios bloques con forma de dedo de una altura de 196 metros apróximadamente, tiznados por el hollín y escupiendo una humacera sombría similar a los relatos de tinieblas, pero en vez de tener vámpiros como protagonistas, tiene a unos seres extravagantes con una dermis bronceada escondida por monos azules y cascos de color nieve.

22:13 : En la parte inferior de la fábrica podemos observar a unos individuos trajeados con gafas oscuras, que absorven unos cilindros castaños para que luego el aire se tinte con una nube de humo... No paran de hablar entre ellos mismos y vocear injurias a los especímenes de mono color añil, reprochandoles un trabajo incorrecto y pausado.

22:34 : He seguido con mi paseo investigador por esta rambla, la cruzo y por fin, veo de cerca eso que dicen los terrícolas que es tan bonito. Un líquido azulado salobre, que almacena vida, que almacena sueños... Si sigo con la mirada desde el fondo del agua hacia mí, cerca, puedo ver a unos humanos con ropaje corto, de color veraniego. En sus manos sostienen un artefacto con un hilo en la parte alta que acaba en un metal con forma de garfio pirata. Al lado hay un anciano contemplando el océano, es extraño que esté perdiendo el tiempo, los demás sujetos están en un" no parar" de trabajo.

22: 37 : Decidí bajar y ver su comportamiento de cerca... Tras minutos y minutos observando no le encuentro lógica a lo que hace, en su mano izquierda sostiene una especie de bloc, y en la otra, una barra de grafito encerrada en un tubo. Probaré con entablar conversación:

- ¿Por qué observa ese cúmulo de un fluído aguoso con criaturas acuáticas que carecen de habla?

- Contemplar es un placer y el placer es una contemplación. Y no, hijo, no carecen de habla, esas "criaturas acúaticas", murmuran, dicen, y gritan lo que hacemos y dejamos de hacer a este planeta...

- ¿Y qué le mueve a mover ese grafito en el folio y estropear así la limpieza del mismo...?

- Es cierto, estropeo la limpieza de este papel, pero limpio mi mente de los problemas.

22:38 : Entonces fue que me dí la vuelta por un estruendo de una barca que iba a empezar a navegar, pero el anciano ya no estaba... Se esfumó, igual que se esfuma la niebla cuando vuelve el buen tiempo, solamente quedaba del viejo su bloc y su lápiz. En la hoja estaba redactado:

Más sabe el diablo por viejo que por diablo, más sabe el mar lo que oculta la urbe, más saben los vocablos, que yo mismo de lo que hablo, más sabe el cielo lo que vemos en las nubes...

No quiero volver a escuchar un pésame
quiero escuchar un bésame
y no ser presa del desarme
que acabe la muerte,
comienze el amé
no creer en suerte
y que sea el verme
lo que me sacie,
que los sauces no lloren
que los tigres sonrían
alzarían mi morte
sin ser de la corte
ni pobre
ni de la burguesía
​

CONTINUARÁ...