Dualidad.

Soy el Elegido.
Soy Respeto.
Gozo de la Vida.
Más o menos.


Un cordero asado, que conoce todos los secretos.


Luego, me despido.
Ése no es mi sino.
Erré el tiro.
Otro concepto. Otra idea. Renaciendo de mis cenizas.





Soy humano y divino. Un Quijote de la Mancha. Un poeta cervantino.


De la pluma y de la espada.
El maestro de esgrima.
Existente; determinado.
Envuelto en su circunstancia.


Disfrazado de alternativas. Escudado en mil aventuras y sueños románticos.


Es la fragua de Vulcano.
El triunfo de Baco.
La vieja friendo huevos.
La Hilanderas de Velázquez.


Así me siento. Como la Rendición de Breda. Los niños comiendo melón...


Soy, en definitiva, bastante simple.
No tan abstracto.

 

A veces esa simpleza se vuelve compleja ante el resto del mundo, cual Julio Cesar, Agamenon e inclusive el propio Zeus. ¡Profundos versos! Un placer disfrutar de su espléndida poesía, Nommo, reciba la más cordial felicitación y saludo.

 

Gracias. Establezco la dualidad entre el respeto, y el hombre. El hombre merece un respeto, pero no es respeto. Es algo más simple. Entonces, el hombre es distinto del cordero asado. Y el cordero asado tiene su propia Felicidad. Y bueno... El Elegido es Respeto. Es lo que yo pienso. Porque Dios es Amor, y su antítesis, que es el Demiurgo, es Temor. Entre medias, queda el Respeto.

 

No no eres abstracto, eres un gentil compañero, que escribe, singularmente lindo
Abrazos amigo
FELIZ SEMANA!!!

 

Gracias, amiga.
Sí, es difícil encontrar un Foro como éste.
Yo me alegro mucho de haber dado el paso...
Pero entiendo que es parecido a un coro de voces polifónicas.
No debemos desentonar. Y hay que abrir el oído...
Para disfrutar de la música.