Durmiendo sobre piedras...

Escribo desde la poca fe envuelta en esperanza,
de que esta sea cierta y calmen las amenazas.
No encuentro labios certeros,
todos a una abren sus bocas como sepulturas,
como cenizas sin redención.
No hay almas transparentes, han dejado de existir.
Son como montañas altas, pusilánimes
que invitan a las mariposas sin alas a saltar al vacío,
como único medio de salvación.
Y caen las mariposas como gusanos a tierra.
Mientras se arrastran con el poco de vida que les queda
y van dejando sobre el asfalto pedazos de su piel
trozos de sus entrañas sanguinolentas,
Aroma a miel y vino es su sangre para los depredadores,
que se lanzan a una para comerse el pastel.
¡Y tú, tú quieres alas, miras al celeste pidiendo volar!
salir de ese trocito de alma que aun respira.
Mas eres pájaro muerto para el mundo que camina.
Y en tus parpados caídos y secos de mortandad,
lees la única partitura que te es valida,
un réquiem de lagrimas negras,
que te delinean unas carreteras terroríficas y oscuras,
sin camino ni destino bajo el sol.

La mariposa que llena de vida y de colores voló,
fue recortada por las manos del ciego.
Al gusano que prometía vivir todos los otoños,
lo desnudaron de su seda,
áspero y seco, murió.
El pájaro que creía que seria compositor de hermosas melodías
le rompieron el pico a hachazos...
Se quedo el trío sin esperanza,
sin verdad,
sin confianza en las gentes de piel...
Mas aun en la sepultura,
no perdieron la Fe amorosa,
la Esperanza alentadora,
la Libertad de alma,
la Ilusión vivificadora,
la Paz sanadora,
y el Enamoramiento del celeste que a todos alienta.

Hay personas que aun duermen sobre lamentos y piedras, para ellos también existe la poesía, aunque a veces sea aterradora…

SHA.

 

Hermoso y emotivo poema nos compartes. Las imágenes conmueven. Me pace muy triste pero muy bueno. Grato leerte. Saludos cordiales.

 

Muchas gracias Lou, tu lectura para mi es todo un lujo.
Un abrazo...

 

Me gusta la acidez del poema .
Saludos

 

Este poema es divertido, dentro de su tragedia, porque retrata una sociedad de consumo, que se tropieza con su propio frenesí, y parece como si el comercio fuera lo más interesante, pero todo se basa en los Recuerdos, y por ello, un elefante jamás olvida, como aseguran en la película de El Libro de la Selva. Es necesario amar la Naturaleza, como hacen los Boy Scouts.

 

Gracias, Lilith. Es una buena de definir lo que sentí cuando lo escribí, pues si, acidez, si.
Un abrazo...

 

Nommo, la verdad es que me has sacado una sonrisa...Y bueno, aunque no pensaba en esta sociedad consumista cuando lo escribía, tu perspectiva tiene sentido...
Un abrazo, Nom, y gracias por pasarte.