El astro de la belleza y la lluvia en osadas naciones

Habemos personas como tú, eres la primera, tienes el sol necesario y las amistades de un dios todo, limitado. Eres la estimación perfecta de la elección gratuita entre un océano solitario o el presentimiento constante de la aversión lunar. Por eso los átomos desmienten entre lo real y lo inexistente pues estas en problemas, has sido escogida puntualmente, sereno de cualquier tesoro abriste tus alas y ahora deformas la actualidad con la metáfora paciente.

Inquilino e inquilina a la vez viste tu cara dorada en el último beso entre las cadenas del terreno sacramental pues se fue el cielo con la luna y ha ascendido en dos peculiares átomos como la gracia ha prometido cada que veo tu panza desde adentro. El ritmo del fuerte ha mezclado el agua con lo absurdo, oscureciendo para los temores prematuros del sol y sus estrellas; entre tanto la lengua materna ha menguado lo suficiente, ahora vemos la paz en todos los seres humanos y caemos con la rabia de la vida que se fue simple con un corazón fuente de la estatua, del muy acentuado conocimiento que es la marea, aproximándonos a los animales en el verso de la angustia.

En el siglo veinte oscurecemos las capitales, somos propensos a modificar esa marea introspectivamente, ya no hay árboles bejucos o mentiras probables, ahora si estamos de vuelta en esa hermosa tierra, ha continuado la desesperación de la luna y tenemos que permitir que la luna sea diosa. Por eso muevo las perlas a la atmosfera, la palabra a la sagrada escritura, impreso está el beso entre el sol o la luna continuando con la conversación que ahora dejo:

-Astro incalculable, ¿hablas de odio?
-Ha sido enojado el astro de la estrella, el medio parlante entre la luna y su tesoro.
-Astro, ¿permaneces intacto con la lluvia?
-El astro a continuación hablara.

La lluvia ha terminado, sentimos el gusto de los árboles y ahora estamos explicando por qué la luna ha muerto, muerto para mí, muerto para todos, sentimos la disculpa de esos astros, tenemos la culpa de haberlos molestado y nuestra es la tierra de ese ataque que esgrime entre las paredes las respuestas correctas. Mi madre ha salido a triunfar, el padre ha sido molestado, el único hijo ya tiene madurez, ahora tenemos que pensar en la luna. ¿Por qué te has retirado?, el astro difiere de nuestros sentimientos pues es el astro de la belleza no el digno encuentro de apolo que ahora llora en la tristeza por no tener sacrificio, tampoco hijos y ese satélite ha salido a la par por construir en pie y sin atmosfera la división del átomo.