el conejito hambriento

Una mañana de primavera, caminaba un conejito por el bosque, estaba hambriento y nada encontraba, de pronto vió una lechuga, que ya parecía pasada pues se veía un poco fea, entonces el conejito pensó, para qué voy a coger esa lechuguita que no tiene ni buena pinta ni me atrae, la dejó y siguió su camino, al poco encontró una zanahoria que estaba medio comida y pensó, para qué voy a comer esa zanahoria que está ya empezada y poco le queda. Siguió su camino, hambriento, pero desconfiado, y repentinamente en un descampado, apareció ante sus ojos la más bella lechuga que jamás había visto, rodeada de pequeñas zanahorias que resultaban perfectas, se acercó y empezó a comer, pero de lo más frondoso del bosque apareció un cazador que lo atrapó y se lo llevó.

Moraleja, no te dejes guiar por las apariencias, porque muchas veces engañan.

 

Bonita fàbula y muy aleccionadora es cierto las apariencias engañan y eso es valable en todos los campos de la vida, se desprecia lo feo, lo que parece insignificante ,lo no atractivo y sin embargo en todo hasta en lo màs oscuro hay luz y magia.ESTRELLAS

 

muchas gracias, mi intención era que el mensaje fuera claro y fácil para todos, que falta nos hace, saludos

 

Jolin po vaya faena no? Jejej pobrecito.abrazos

 

hay pobre conejito y no puedes continuar la historia para que se escape el conejito corrija su acción y sera mejor en que pensemos que sirvió de comida y que esta bien cometer errores pero es mejor saber que podemos salir de ellos aveces esas fabulas son ultimadoras, guao lloro por el conejo tengo de mascota unooooooooooo

 

podría, cambiar el final o hacer una segunda parte, pero creo que entonces ya no sería el mismo mensaje, gracias por leerme

 

si, bueno la verdad es que los finales pueden ser trágicos si no somos capaces de cerrar los ojos y mirar con el corazón

 

Ayyy pobre conejitooooooooooo!!! jaja
ummm, es cierto las apariencias engañan pero a veces las personas se quieren dejar engañar, otras veces se meten en la cabeza que la apariencia es más importante, cuando hasta en presencia de alguien bello por fuera y por dentro siguen desconfiando, ninguno de los dos extremos es bueno.
Habrá que confiar más en lo que se siente...
Me gustó leerte, un abrazo!!

 

muchas gracias por tus palabras y saludos