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Tema en 'Prosa: Generales' comenzado por Edouard, 17 de Enero de 2017. Respuestas: 1 | Visitas: 403

  1. Edouard

    Edouard Poeta adicto al portal

    Se incorporó:
    15 de Marzo de 2016
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    Género:
    Hombre
    En aquella nebulosa capilla de tiempos inmemoriales - ya caído el ocaso sanguinario de la noche - tenía el obispo nacional la venia de entrelazar en amor mutuo al príncipe del sol con la doncella de la luna. Cuando ya estaban frente al altar condecorado con blancos cirios chisporroteando sus llamas de lúgubre y pasajero tiempo fantasmal, un individuo de tez amarillenta, ojos verdes y chata nariz comenzó a vociferar como un energúmeno. Diciendo que el lazo sagrado que se fecundaría en ese mismo instante traería consecuencias nefastas a la comarca. Dos soldados que escoltaban la salida del templo se dirigieron hacia él y, cogiéndolo por los brazos, lo arrastraron hacia la intemperie. Donde ahora granizaba fuego sulfúreo. Quedando sus carnes magulladas y su vida casi a punto de expirar. Mientras, en el interior se oían las últimas carcajadas de un pueblo que veía en tal unión de noble hombre y montaraz mujer la remisión de sus males. Los ojos del Altísimo se posaron sobre las almas de los circunspectos y la gracia se derramó como una aljaba.
     
    #1
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  2. Edouard

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    homo-adictus, las bodas reales entre aquellos novios remiten a un sentido alquímico, ante el cual el espíritu se aúna con el alma para expandir la conciencia universal. El energúmeno, que tanto chillaba por la creencia de una tragedia en ciernes, remite al ego que ve peligrar su debacle de agregados psíquicos. Ante tal afrenta, los caudillos que vigilaban el inviolable cuerpo templario se lo llevaron a las tinieblas exteriores. Donde allí perecería en un escarmiento de disolución sulfúrea. Riendo sonoramente las entelequias angélicas - representadas por el pueblo - y regocijándose por la vía sagrada de la purificación substancial ante la cual el Eterno depositaría su más que ferviente amor de madurez trascendente. Atentamente Edouard.
     
    #2
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