El espejo

Era la tercera vez que intentaba mirar su reflejo en aquel viejo espejo pero cada vez le resultaba más difícil elevar sus ojos. Quiso, como tantas veces sentirse dentro del cuerpo de su madre, ella había sido tan bella que dolía cuando pasaba a tu lado. Era grácil, de largas y finas piernas, su dulzura envolvía a todo aquel que la contemplara, sus ojos eran casi transparentes, pero podía verse una inmensa fuerza en su mirada. El cabello, ligeramente ondulado, brillaba sin que el sol posara en él sus rayos. Y su piel, ah! su piel, siempre tan suave y tenuemente tostada. Recordó su olor, olía a canela, era dulce y exótica…, en aquella época en las que las damas adornaban su cuerpo con toda clase de lujos, la sencillez caracterizaba a su madre, sólo necesitaba un poco de brillo en sus labios y alguna flor en su pelo.

Lo intentó de nuevo, a pesar de todos los tratamientos que había llevado a cabo seguía sintiéndose vacía, estaba demasiado lejos aún de su objetivo.

“Estás preciosa”. La voz la asustó, provenía del fondo del salón. Su marido la observaba en silencio, y suavemente se acercó a ella, contempló su imagen en el viejo espejo y repitió “Estás preciosa”, ella se volvió sintiendo repugnancia pero dejó que la mirara.

Esta noche iremos a ese famoso concierto que tanto esperas y, estoy seguro de que serás el centro de todas las miradas. Ella sintió que la náusea se apoderaba de sus entrañas y quiso desaparecer. Sin mediar palabra se giró con violencia y contempló con absoluta desesperación su cuerpo en descomposición. Vió como los años implacables la alejaban más y más de su objetivo, descubrió las manchas en su piel de anciana, su cabello sin brillo era solo un espejismo dentro de aquel miserable engendro que había ido creando, su olor, se confundía con la naftalina que por años había guardado aquel espantoso abrigo, ya sin brillo y que como ella pertenecieron a aquel pasado esplendoroso de fiestas y lujos que la rodearon cuando niña.

Él se alejó asustado, impotente, supo que no podía seguir engañándose a sí mismo, supo que ya nada se podría hacer por ella, tantas veces la amó por su bondad y la sufrió en su desdicha de no querer ser ella. Sintió pánico al escuchar el golpe contra el viejo espejo, pero esta vez no hizo nada por impedirlo, tenía demasiadas llagas en su cuerpo mutilado, sintió el calor de la sangre en sus manos y al fin se sintió liberado del esperpento que tantas veces y con dolor había visto reflejado en el viejo espejo.
:::blush:::

 

Fuerte, duro tu relato. Un contexto que aclimata desde un principio. Terrible imagen que se resiste con náuseas a aceptar el paso del tiempo. Excelente, te felicito...mis estrellas.

 

Bello cuento gótico en el que unes a lo fantástico una atmósfera dulcemente romántica. Luis

 

Gracias Luis, viniendo de ti es todo un elogio

 

gracias por tus palabras Ludmilla, es mi primera vez y tenía muchas dudas

 

Plas,Plas, Plas, muy bien mi amor

 

entendiste el cuento caminante?

 

Parece ser que....bueno quizás....claro que...entonces...me suena es hermoso, un beso amiga

 

Creo que si, nos vimos en otra vida

 

Excelente descripción, con mucha profundidad y arraigo. felicitaciones. saludos y besos con cariño.

 

gracias Yaneth por tu comentario y descubrirme cómo seguir tus huellas.

 

Además de un espejo que no refleja el cuerpo de la madre de la protagonista hay mucho más en este cuento,por ejemplo el anhelo de ser otro totalmente distinto a lo que realmente somos.Y es que los espejos dan mucho de sí.El cuento tiene todo lo que me gusta de un cuentoscuridad en el alama de la protagonista,es corto ,con lo que no se pierde en situaciones banales y que casi siempre lastran la acción.Mi opinión es que si algo puede contarse en diez líneas,no hay por qué usar veinte.El cuento es escelente y me gustó mucho.Un beso y nos seguimos leyendo.Estrellas y reputación.

 

Muchas veces se desea ser quien no se es, gracias por tu lectura y por tu generosidad, éste es seguramente, el que más me gusta de todo lo que he escrito, me alegra mucho que a ti también te guste.
Un beso con mucho cariño

 

Huellas
que difícil es aceptarnos a nosotros
cuando no nos queremos,
lo mismo que aceptar a los demás
cuando intentan sonreirnos...
pro tan difícil es soportar a quien no nos da motivos,
y es que ser generosos con nosotros o conlos demás suele ser un martirio.
Precioso relato del egocentrismo y la tolerancia fingida, y mis estrellas
Bssstos

 

Gracias Kique, es una alegría para mi tu comentario sobre esta prosa, que por algún motivo me gusta mucho, quizás por lo que tiene de irreal - real. Un beso con mucho cariño

 

Magistrales lineas querida huella me ha atrapado de principio a fin, yo también he comenzado a destestar la cruel realidad de los espejos, escribi hace mucho tiempo un monologo al espejo y también le he escrito algunos versos, cuando somos jovenes es nuestro màs fiel aliado, cuando envejecemos nuestro peor enemigo, estrellas y reputaciòn te dejo: eres espejo de buen reflejo.

 

Me gusto mucho tu relato,saludos

 

Que frase más linda ésta última aunque yo no me la merezca, el otro día leí una que viene bien para ese estado que comentas, " Cásate con un arqueólogo, cuanto más vieja te hagas más atractiva te encontrará" jaja, bueno siempre hay un roto para un descosido dicen, echaré un vistazo a ver si encuentro ese monólogo tuyo, en cualquier caso te agradezco mucho tu presencia y palabras.

 

Gracias Mariposa, y a mi que lo leyeras y poder conocerte. Un abrazo

 

Una descripción exacta de personas quen se amargan la vida por compararse con los demas y nunca terminar por aceptarse como son. Aleccionador relato y muy imaginativo.

 

Me alegra mucho que te guste, le tengo especial cariño a este pequeño cuento que por lo demás fue un poco experimental. Gracias por tu visita, un abrazo

 

... conmovedor... Excelente prosa Huellas, grata lectura, muchas gracias

Un beso

 

Gracias a ti Rosaela por rescatar esta prosa, la verdad es que es una de las que más me gustan.

Un beso

 

Gracias Vicente por tu enriquecedor comentario y por tu presencia. Un abrazo con mucho cariño

 

Impactante! la primera parte cuando recuerda a su madre me recordó unos pasajes de "Guiglietta degli spiriti" de Federico Fellini. Felicitaciones amiga!

 

Difícil aceptación esa del espejo. Escribes bien porque no he de decirlo, aunque mis comentarios son muy simples son sinceros .No todo el mundo sabe expresarse con las letras como lo haces tú, te he leído varias veces y cada vez me esponjas más en tus escritos. Grato el rato que le he dedicado a tus letras. ABRAZOS

 

Gracias generoso!!, ahora que la leo después de los años de haberla escrito, le veo errores por doquier pero eso supongo que forma parte de otro aprendizaje.
Por cierto, cuando era veinteañera vivía con 4 compañeras de piso... una jauría en fin, era el más alto y estaba ubicado en una calle estrecha con una cuesta muy pronunciada. Cada vez que volvía a casa, miraba el tendal desde la acera y era como ver una peli de Fellini jajja. Genial

 

Eres muy amable Rosa. Antes me gustaba mucho escribir pequeños relatos y la pena es que no guardaba casi nada, quizás algún día me ponga a ello porque la prosa la disfruto mucho.
Un abrazo

 

Tan efímera la belleza como la de aquellas mariposas de tus versos. Crear es a la larga, mucho más gratificante que ser, cuando se ES sólo por fuera verdad? Gracias por estas visitas tan estimulantes.

Un abrazo