El fruto respira

Entre las dos cabañas habìa un árbol pisando la hierba, constructivamente el lado opuesto de la cabaña veìa hacia el oeste, sin quitar nada de los corrales por la mañana se hacia otro monton afuera de la otra. Si se quiere vivir en el campo te das cuenta que las cosechas, parten de un solo dìa mientras que los caballos son cada vez mas mayores, el circulo primitivo que une al campo con la ciudad es un simple efecto entre lo que acaba de pasar y su periferia, a lo largo del dìa tu vez arboles comiendo de entre las sombras, son bichos que duermen de dia abajo.

A la vez que se ve el cielo, se va comiendo uno o dos trozos dentro de el, la cosecha parte, de una velocidad común que acecha a los hombres salvajes y media a los mas primitivos, conociendo a los primitivos como mayores, ancianos o personas resagadas que mueren hasta el mas pequeño de los pajaros; sin quitar del suelo esos atroces monumentos, esos hombres aparentan crecer como los demás vivientes.

La ayuda es placentera entre los días venideros, se ensancha lo que queda de comida y poco a poco va perdiendo su sabor el dìa. En el verano no hay otra cosa que hacer mas que aprovechar la comida e irse alejando de lo que queda de la naturaleza del hombre.