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"El Gigante del Puerto" Narrativa

Tema en 'Prosa: Generales' comenzado por FORJADOR, 12 de Septiembre de 2010. Respuestas: 4 | Visitas: 2232

  1. FORJADOR

    FORJADOR Poeta recién llegado

    Se incorporó:
    26 de Julio de 2010
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    Texto…………….Narrativa
    Título……”El gigante del puerto”

    En los años sesentas, época de mi niñez ,la vida me ubicó de pronto en un lugar de nuestra república mexicana, el puerto de Tampico Tamaulipas.
    Habíamos llegado ahí por debido a que mi padre , que era músico; mariachi para ser exacto, logró que le contrataran para una temporada de trabajo que incluía entre otras cosas, acompañar musicalmente claro está , a artistas mexicanos famosos de aquella época, como ejemplos: Antonio Aguilar, Flor silvestre, Javier Solís… entre otros.
    No era la primera vez que mi padre utilizaba esta estrategia para poder tener a la familia unida, de hecho, mi madre, mis hermanos y yo; casi siempre le acompañábamos en sus giras de trabajo, así conocimos Aguascalientes, Reynosa, Nuevo Laredo, Monterrey y mas ciudades, prueba de ello es que todos somos nacidos en un lugar diferente, de las veces que no le acompañamos recuerdo la ocasión en que el presidente de la república de aquel entonces, queriendo llevar algo representativo de nuestro folklor mexicano a Rusia, incluyó en su comitiva artistas del género ranchero, entonces mi padre tuvo la oportunidad de viajar con ellos y acompañarles en sus presentaciones en aquel país.
    Pero volviendo a nuestro relato y ubicándonos de nuevo en Tampico, resulta que fuimos muy bien recibidos en el lugar a donde nos tocó habitar, era una vecindad ubicada a una cuadra del “muelle” en la calle de Dr. E. Gochicoa. En el populoso y conflictivo barrio del “cascajal”. L a dueña del sitio, “doña Vita” nombrada así por afecto, de inmediato puso al tanto a mi madre en todos los aspectos; de los peligros, de las costumbres y sobre todo de la manera en que debía de preparar los alimentos que se cocinaban en esta región, y en poco tiempo aprendió a elaborar todo lo relacionado con los platillos de los productos del mar. Ocasionalmente le acompañaba a las “pescaderías” del rumbo a comprar lo necesario para la comida, cierto día, cuando regresábamos y al pasar por “el muelle”, se escuchó tras de nosotros un sonido ensordecedor, se trataba de el silbato que anunciaba la llegada de un enorme barco que se aproximaba al embarcadero, luego nos enteramos que el motivo por el cual estaba en el puerto tenía que ver con una serie de exhibiciones que venía dando por diferentes partes del mundo, era un inmenso y antiguo barco de guerra.
    Varios amigos y yo, entre muchas otras personas, tuvimos la suerte de poder abordarlo ya que un hombre vestido de militar al pié de la escalinata, invitaba amablemente a toda la gente a conocer su interior, al entrar; quedé maravillado por todo lo que ahí vi, por doquier había actividad, disciplina y extraordinaria limpieza de la proa a la popa, fue esto para mí, una experiencia inolvidable, a mi corta edad, tanto marineros como el capitán del barco se me hacían personajes dignos de admiración y de respeto.
    En el transcurso de unos días se marcharon y todo volvió a la normalidad, fui conociendo cada vez mas lugares; la playa, a la cual llegábamos en tranvía, la plaza de armas en el centro frente a la catedral, donde se desarrollaba el carnaval todos los años por el mes de marzo, la plaza de toros Gaona, escenario de importantes cotejos taurinos, la escuela “Gabino Barreda”, donde cursé mis primeros años de estudio, en fin… Pero lo que estaba por conocer; marcaría trascendentalmente mi vida.
    En cierta ocasión, mis padres me enviaron al mercado a conseguir lo necesario para cocinar unas deliciosas y suculentas “Jaibas”, el lugar estaba repleto, “de pronto”, entre la multitud, me llamó poderosamente la atención, la figura de una persona que se dirigía en sentido hacia mí, caminaba lentamente y movía la cabeza de un lado a otro del recinto, cuando pasó me quedé como petrificado, impresionado totalmente por la extraordinaria estatura de aquel hombre., ¡era enorme!, en verdad que ¡era enorme!, su altura sobrepasaba por mucho la de todos los que por ahí transitábamos, se le podía ver desde cualquier punto del mercado.
    El, mientras tanto; seguía caminando pausadamente, sin prisa alguna, con un costal bajo su hombro, el cual, en repetidas veces colocaba en el piso para guardar lo que amablemente le obsequiaban los locatarios del sector, a su paso., por doquier se escuchaban exclamaciones como éstas.....!Hola Pepito! Toma esto para tu costal; ¡Adiós Pepito!, ¡Oye Pepito!, ¡recuerda que mañana vendrás a trabajar a mi bodega!, a todo lo cual el solamente asentía con un ligero movimiento de su cabeza.
    Al regresar a casa, todavía emocionado y mientras comíamos, le comenté a mi padre lo que me había ocurrido, el solamente se sonrío y me dijo…. ¡Ya le conociste!, luego me explicó que Pepito, como le llamaba toda la gente, era todo un personaje por aquellos lares, pues su gran estatura y su enorme fuerza; resultaban de gran utilidad para los dueños de las embarcaciones que llegaban a descargar su mercancía….tuve la oportunidad de corroborar lo antes dicho pues, a partir de entonces, con frecuencia le veía trabajando en las barcazas que llegaban a la orilla del río Pánuco, provenientes de “Pueblo Viejo” o de otras comunidades cercanas . Siempre apacible y callado, pocas fueron las ocasiones en que le vi sonreír, tal vez su apariencia y su tamaño fuera de lo normal, lo hacían verse como un hombre atormentado y solitario; como anécdota les contaré la única ocasión en que lo pude ver exaltado y fuera de sí.
    Una noche: entre las nueve y las diez, se empezaron a escuchar de pronto gritos, voces altisonantes que provenían de un negocio dedicado a la venta de licores ubicado en la esquina de la calle donde vivíamos, de nombre, “La Coronela”; cuando salimos a ver lo que ocurría, unos policías salían del lugar con unas personas detenidas, con ellos venía “Pepito”, desconozco el motivo por el cual lo apresaban, lo cierto es que mientras entraban por mas alborotadores, dejaron a “Pepito” esposado al pié de una patrulla del tipo de las que les conocían como “Las Julias”. Repentinamente, enfureció a tal grado que empezó a zarandear la patrulla de un lado a otro hasta que se vio libre de las “esposas”, luego, ante la mirada incrédula de todos los presentes, volteo la patrulla llantas arriba y se retiro del lugar como siempre, sin prisa, a su acostumbrado paso; los policías no expresaron palabra alguna, solamente se miraron entre si y esbozaron una tibia sonrisa, como entre la admiración y el miedo.
    En el año del sesenta y seis, vino a este mundo mi hermana menor, en el hospital que llevaba el nombre de “Dr. Carlos Canseco”, escasos dos meses después, azotó al Puerto de Tampico un tremendo “ciclón”, la verdad , no recuerdo si fue el “BHEULA” o el “INES” por debido a que pasamos ahí los dos fenómenos meteorológicos, lo que recuerdo bien es que, la madrugada en que el “ciclón” toco tierra y mientras los soldados de nuestro Ejército Nacional nos trasladaban a los refugios ubicados en las partes más altas y seguras, escuche a alguien que le gritaba a una persona que caminaba bajo la tremenda lluvia y el viento “vamos sube al camión”, era “Pepito”, que totalmente empapado avanzaba guareciéndose a medias en los faldones de los negocios y las casas por donde pasaba, su negativa fue solamente el levantar su mano por encima del hombro y avanzar hasta perderse en la oscuridad de aquella tremenda tormenta.
    Fue la última vez que le vi con vida, al paso de los meses regresamos de nuevo a Monterrey, Nuevo León. Por obra del destino en el año del 96 y por motivos de trabajo, regrese de nuevo a Tampico , obviamente , ya casi no existía nada de lo que yo había conocido en mi infancia, le pedí a un compañero de trabajo de favor me acompañara al barrio donde había vivido y para mi sorpresa, observe con emoción que la pequeña casita que había sido nuestro hogar 30 años antes, aun se mantenía en pie, parecía que por ella no habían pasado todos esos años, al verla sin quererlo unas lagrimas se asomaron a mis ojos , pues recordé lo inmensamente feliz que había sido en aquel lugar, me quede mirando por unos minutos la casa , luego respire hondo y me aleje de ahí, para nunca más volver.
    Respecto a “Pepito” me entere que había fallecido en el año de 1973 su nombre completo fue José Calderón Torres y a su muerte tenia la estatura de dos metros con treinta cinco centímetros.
    Sus restos descansan en el panteón municipal de Tampico Tamps., pero sus recuerdos y sus hazañas siempre estarán vigentes, bastara con que cierre mis ojos, para verlo de nuevo caminar por todos aquellos lugares tan pintorescos, para mí siempre será un ser extraordinario que conocí y recordare con el apodo de “El Gigante del Puerto”
    ---- Fin ----

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    #1
  2. ROSA

    ROSA Invitado

    Buena narrativa,un abrazo
     
    #2
  3. FORJADOR

    FORJADOR Poeta recién llegado

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    Muchas gracias por tomarse el tiempo de pasar por esta narrativa, saludos afectuosos.
     
    #3
  4. Emy nancy

    Emy nancy Poeta que considera el portal su segunda casa

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    [FONT=Comic Sans MS][COLOR=darkgreen] Forjador lei tu historia, que hermosos recuerdos, Que hermoso seria volver a ser niños otravez, [/COLOR]
    [FONT=Comic Sans MS][COLOR=darkgreen]te quiero pedir que por favor leas un poema que se titula: Dios mi Papa y Amigo, este es mi link:[/COLOR]
    [URL="http://www.mundopoesia.com/foros/poemas-de-amor/289266-dios-mi-papa-y-amigo-post2871607.html?highlight=#post2871607"][FONT=Comic Sans MS][COLOR=darkgreen]http://www.mundopoesia.com/foros/poemas-de-amor/289266-dios-mi-papa-y-amigo-post2871607.html?highlight=#post2871607[/COLOR][/FONT][/URL][FONT=Comic Sans MS]:S
    [FONT=Comic Sans MS][COLOR=darkgreen][/COLOR]
    [FONT=Comic Sans MS][COLOR=darkgreen] Te felicito por tu escrito; muchas bendiciones, y sigue adelante, una amiga Emy Nancy.[/COLOR][/FONT][/FONT][/font][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT]
    [FONT=Comic Sans MS][FONT=Comic Sans MS][FONT=Comic Sans MS][FONT=Comic Sans MS][FONT=Comic Sans MS][FONT=Comic Sans MS][/font][/font][/font][/font][/font][/font]
     
    #4
  5. FORJADOR

    FORJADOR Poeta recién llegado

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    Amíga Emy Nancy
    gracias por sus bendiciones, por su lectura, pero sobre todas ls cosas
    gracias por su amistad.
     
    #5

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