El peso de mi sombra

EL PESO DE MI SOMBRA


Tendida junto a mí

horizontal y pasiva

como tú

no especular

sino subalterna

de mis menores movimientos

así es la sombra

mi sombra

Pisoteada por las gentes que deambulan

sin importarles aquella sombra tendida

asida a mí

sin ataduras visibles

¿Cual será el peso de mi sombra?

¿cual la del árbol en cuya sombra se diluye la mía?

Un peso inimaginable

que la mantiene prisionera

de la luz que la alimenta

Peso cósmico

que la aplasta dejando apenas libre

una zona de penumbra

Y, en cambio,

es tan fácil matar la sombra

apenas unos pasos

separan la sombra viva

de su muerte

Yo, sin desearlo,

mato cotidianamente mi sombra

todos matamos sin quererlo

nuestra sombra.

La noche

esa asesina universal

de todas las sombras

me absuelve del crimen horrible

que cometo con mi sombra.

La noche, mi compañera,

mi querida noche

en la que no existen las sombras

me arropa con la oscuridad universal

diluye mis contornos

me elimina

junto a mi sombra

Soy un asesino asesinado

siempre hay alguien

que hace pequeño tu crimen

la redención general

está latente

en la sombra.


​

 

Muchas gracias, querida compañera. Me siento muy honrado con tu visita y tus elogiosas palabras. Un cordial saludo,
miguel

 

Interesantes disquisiciones y reflexiones sobre esa sombra siempre latente.

 

He encontrado este magnifico poema, por casualidad al entrar, y por esas cosas que suceden, ya sabes, coincidencias de poetas noctámbulos.
Creo que nuestra sombra encuentra en la noche su hábitat, su lugar, su morada...la noche ese lugar mágico donde nuestra sombra libera de todo su peso, el lugar común de los poetas noctámbulos.
Ha sido un placer encontrarme con tus letras, mi mas sincera felicitación.
Isabel

 

Hola, Antonio. Me felicito por haberte convocado de nuevo a mis letras. Tu presencia junto a tus comentarios son un gratisimo aliciente para mi. Un cordial abrazo, amigo mío.
miguel

 

Hola, Maramin, querido compañero y maestro. Paso a mi "cuadro de honor" tu comentario, por el que me siento muy honrado. Mi especial agradecimiento por tu visita.
miguel

 

Hola, Isabel, querida compañera. La casualidad no reduce para nada la belleza y la oportunidad de tu hermoso comentario. Aquí queda en toda su hermosura. Yo también participo de la noche como de ese magma universal en el que tantos brillos se encienden hermoseando la sombra y dejamos a la serendipia que nos cubra con su manto mágico. Para nosotros, que tenemos algo de búhos, no tiene nada de procelosa. Un cordial abrazo, amiga mía.

 

Hola, Martín Renan. Profundo tu comentario. Y es que, efectivamente, la sombra, nos define sobre la claridad, que nos diluye y anula. Muy interesantes tus palabras. Un cordial saludo,
miguel

 

Muchas gracias, Tribu. A pesar del calor todavía tienen humor para dedicarme estas palabras de ánimo. Te las agradezco sinceramente... Un abrazo,
miguel

 

Hola, Uqbar, querida amiga. Me hace muy feliz que alguna de tus entradas en el foro las dediques a mis poemas. La sombra siempre me ha atraído como hecho poético, aunque reconozco que este poema no se ajuste a mis expectativas. Tendré que seguir puliendolo. Un abrazo veraniego, amiga mía.
miguel

 

Te ha faltado añadir, querido Fulgi,"la mala sombra", eficaz sistema para ahuyentar moscardones en las tardes de siesta. Por lo demás me parece el tuyo un "comentarius interruptus". O sea... Un abrazote, amigo mío.
miguel