El pozo 1

El pozo que está en el patio
mira fijo:
con su pupila de agua
mira fijo,
entre párpados de cal
tiene fijo
el norte de mis insomnios
sin cobijo.

El pozo de mis insomnios
me reclama:
verde la estrella sombría
con su llama
es del pez de mi destino
fría escama
en que el sueño se refleja
con su drama.

Mira fijo lo que viene
de mi llanto
a fundirse con sus aguas
en quebranto
de la luz que me abandona
con su canto:
es la paz que me recibe
con su manto.

 

Estimado Jorge la melancolía de la edad, propia de el espíritu cansado y como décimos aquí harto de coles, de lucha y soles, cansado de remar, eso me ha trasmitido tu lúgubre pozo, querido amigo, quizás me he quedado en la superficie, quizás no he sabido leerte, pero es lo que me ofrecen tus bellos versos, un fuerte abrazo.

 

Pues lo has entendido muy bien, estimado Carlos. Ese pozo lo he puesto como metáfora de una tentación triste, que por suerte no siento en realidad.

abrazo
j.

 

Jajajajajja, no hace falta que lo jures ¿algún navegante lo tiene?, lo dudo mucho querido Jorge, un fuerte abrazo. Te felicito por tu texto de nuevo, me ha encantado.

 

Lo primero que me llama la atención es que repitas el mismo verso en los dos primeros quebrados: mira fijo y mira fijo, o sea que es un pozo que se fija mucho. Debe ser un pozo de sabiduría. Ejem.
Bromas aparte, está clara la impostura de los quebrantos, por lo que acabo de leer, o sea que ya me quedo más tranquila.
Que ese pozo te atrae y no para nada bueno.

Abrazo.

 

Mi primera intención en este poema fue imitar un hermoso poema de Nicolás Guillén, que comienza con el verso «La palma que está en el patio»: algunos restos quedaron de esa primera intención. Finalmente quedó lo que quedó, una variante de la «cuaderna vía», quizás por contagio de mis lecturas sobre la poesía medieval (parece ser que antes que se usasen alejandrinos se usaban dodecasílabos en la cuaderna vía). Sigo explorando los efectos rítmicos de los quebrados, de los que Carlos nos ha dado una lección (así no vale, se aprovecha de que es músico).
gracias por pasar, estimada Eratalia
abrazo
j.

 

Normalmente al hablar de un pozo lo primero que viene a la mente es un lugar oscuro, silencioso y hasta temeroso pero si se reflexiona no todo es malo en él, cuestión de cómo se encuentren las emociones del momento creo, me gusta su estructura y esa melancolía que fluye sutilmente, un agrado leerle, saludos!

 

Jorge...qué poema este tuyo y qué tema! Fue un ejercicio muy interesante esto de indagar por esos lugares, que al menos yo en general suelo evitar: la oscuridad, lo desconocido, lo que no es tangible. Digo, quizás no fue tu intención pero a mí me condujo inevitablemente por ahí. Veo que en tu caso la imagen del pozo, también te sugiere algo similar.
De más está decir que es un texto precioso y muy interesante.
Un abrazo:
Malena.

 

Como le decía a Carlos, esa tentación no me seduce, por ahora. Es interesante este asunto de la repetición en los poemas, en que tan experto era Nicolás Guillén.
abrazo
j.

 

Precioso poema, Jorge.
Con la primera se me vino a la cabeza aquella estrofa de «Romance Sonámbulo» en la que la gitana se mece sobre el aljibe con ojos de fría plata.
Muy bueno, compañero, aquello de «entre párpados de cal»...
De la segunda me encanta la continuidad y coherencia sintáctica encabalgada en toda ella.
Y qué hermoso el cierre, y qué triste.
La estructura me parece que encaja como un guante con el tema. Qué fuerza los quebrados monorrimos. Conforman un poema por sí solos,


me reclama:
con su llama
fría escama
con su drama.

de mi llanto
en quebranto
con su canto:
con su manto.

Abrazo.

 

La verdad es que lo primero que me viene a la mente al hablar de pozos son los que hacía de niño en la arena del mar... ¿por qué nadie les dedicó su poema a esos pozos?

abrazo
j.

 

Jorge...
Regreso al foro que tanto extrañaba aunque fue mayor mi sorpresa de ver que siguen activos y dejando esencia pura en las letras. Me adentré a leerte y ver en esos quebrados que definitivamente los pozos provocan muchas sutilezas, yo creo que entre todo la imagen que diviso al leerte es la de una celda de inquisidores sosiegos. Encantado de llegar. Un fuerte abrazo!!!

 

¡Luis Pragmah! ¡Menuda y agradable sorpresa verte por acá, hombre!
Sí, más bien una celda definitiva mi pozo en esta ocasión...

Sí, tuvo sus ires y venires la tensón en este tiempo, pero aquí estamos...

grandísimo abrazo
Jorge

 

Los pozos... esos pozos donde la vida cae o se asoma, y que nos hace ver una oscuridad que a veces solo está en nuestra mente, drama , llanto o solo un eco que se pierde sin respuesta, pero que nos hunde. Muy profundo es tu poema, como el pozo que da titulo
Un abrazo querido amigo
Carmen

 

Con un buen puntapié inicial abriste este nuevo ciclo dedicado al pozo, un pozo que te ha inspirado nostálgicos y melancólicos versos, que nos deja ver un estado de ánimo que no precisamente debe ser del poeta que lo escribe, pero éste con su hábil y maestría ha logrado dibujar unas imágenes que quedan grabado en mis pupilas al leerlo.

Encantada de leerte, Jorge, y de acompañar con mi humilde aporte poético y mi sincero comentario.
Un abrazo,
Romi