El reencuentro

Aquella tarde, la encontré en el parque

Estaba sentada mirando a la fuente

aunque parecía que quizá su mente

Destrozaba ideas, al igual que el agua

De aquella cascada.



Mucho tiempo antes,

Lloraron sus ojos

Y con rostro inerte, carente de enojos

Llegó a despedirse

Me dijo hasta luego

Se marchó por siempre



Como no mirarle

Si fue mi razón y las mil razones

Para una canción?

Como no mirarle, si en sus ojos negros

un diciembre triste, murió mi ilusión?



Como no mirarle

Si sus blancas manos

detenían el tiempo,

Muchas esperanzas,

todos mis deseos

caricias y el sol

Si junto a mis manos

Construyeron sueños y castillos

Que el viento borró.



Como no mirarle, si soñó con migo

Sueños que el tiempo, el agua,

el viento y el sol

No pudieron nunca destruir

Fueron solo sueños y esos no se mueren

Quedaron en versos y en los discos viejos

Que se irán con migo en el corazón



Cómo no mirarle

Si antes de marcharse

Lloraron sus ojos, y me dijo amor

Me voy con el alma triste,

triste por tu amor.​

 

En ocasiones yo también me cruzo con la efigie de alguien que fue algo totalmente distinta en el pasado. Saludos cordiales, Pablo.

 

Gracias, sergio amigo