El sauce llorón

El sauce llorón no es ese
que cuando llega el estío,
se refresca y resplandece,
sobre el espejo del río.​

El sauce llorón, no es ese
que ves frondoso y bravío,
y en su hamacarse parece
desperezarse al rocío.​

El sauce llorón es otro,
que en los jardines, sombrío,
ve pasar la vida, solo,
entre jazmines y lirios.​

Ese es el sauce llorón
que solitario y vacío,
ve marchitar su ilusión
entre las flores, perdido.​

Ese que en tardes de enero
triste se muere de frío,
y envidia a su hermano islero,
su romance con el río.​

Ese es el sauce llorón
que en lenta lágrima verde
desangra su corazón,
por que no hay quien lo recuerde.​

El añora de otros sauces,
verlos poblados de trinos.
siempre entregándole al cauce,
tronco, ramas, y destino.​

Y mientras, le pide al viento,
y a la lluvia que lo moja,
le acorten el sufrimiento,
se van muriendo sus hojas.​

El sauce llorón es ese,
que ves, marchito y caído.
Y así, su copa envejece...
En un jardin florecido.​

Marino Fabianesi ​

 

Muy buenos versos amigos; hay tantos sauces inmóviles en departamentos lejos de ríos y hasta de lluvias de estíos. Mis saludos.

 

Eso es lo que he querido decir, amigo. Es un placer tu visita cipres, como siempre.
Un abrazo, Marino.

 

Precioso poema Marinof..lleno de sentimiento y musicalidad,y con un tema que me encanta desde niña..los sauces llorones,en un parque al lado de mi casa habia muchos.
Mejor dicho,no era un parque,eran unos terrenos de una fabrica de zapatillas plagados de sauces llorones .
Más tarde cuando la fabrica fue a pique ,hicieron alla un parque..pero conservaron los sauces.
Me enrollo...en fin Marinof,que me has puesto nostalgica recordando al sauce llorón...muchas gracias por estas preciosas letras..besos

 

Pilar, si supieras lo feliz que me haces al leer mi poesía...
te agradezco desde lo profundo de mi corazón, tu cercanía. Espero corresponderte cada vez, con más poesía.
Un abrazo.
Marino