El trabajador japones

¿Era tarde?, tal vez si, en realidad no lo sé, quien puede asegurar que sabe algo con certeza, Lo cierto es que el sol se mantenía estático,Lo que impedía saber si era el fin o el comienzo del día, El tren no pasaba, de pronto La estación se empezó a poner extraña,luego empezó a tornarse Siniestra,pasado un tiempo la estación cobro un total silencio, no había nadie, El tren no llegaba, Mi cuerpo empezó a sentir un pequeño soplo una especie de ráfaga de brisa como esas de noche de verano . Un sentimiento de frío se apodero de mis manos, No las sentía. Pequeñas agujitas me pinchaban el cuerpo, El tren no llegaba, Que sería de mí, Si caía la noche, Pobre mi alma En que guarida de demonios se había posado, El frío ,La estación ,Las sombras, Los rieles que más bien parecían labios haciéndome muecas, Los grillos que cantaban de forma grave en extremo, Decidí volver, Acercarme a la estación para preguntar por el tren, Pero ya no había nadie, Donde se había ido todo el mundo. ¿Por qué no pasa el tren?...... me empecé a intranquilizar, Escuchaba ruidos que solo estaban en mi cabeza, No quiero, No quiero me repetía Una voz dentro de mi cabeza, La hora pasaba, me senté en un banco y empecé a llorar, No sé por qué tal vez de miedo, Si, de pánico, De dolor, fuerte y retumbante dolor como el de los cohetes que van a la luna, No, yo no quería sentir ,no quería sentir, era demasiado sentir Así, No era normal, Las baldosas de la estación eran tétricas y simulaban cripticos mensajes que no entendía , y que sin embargo parecían estar ahí solo para que yo los descifrara, La vi, A ella, Era Ella , Y me llamaba, me incorpore con fuerza, como hipnotizado sonreí, La seguí , Si, la seguí, Camine hasta el borde y caí a los rieles, Entonces el tren paso.
Era la hora punta en la estación Yokusuka, En Japón, de pronto un hombre salto a los rieles, El tren paso y una madre le tapaba en ese mismo momento los ojos a su hijo, El hijo a su vez le preguntaba a su madre con una calma inhumana: ¿por qué aquel hombre se había arrojado a los rieles ? y la madre le dijo : cuando uno hombre llega a sentirse tan solo como para no ver a la cantidad de gente que hay en hora punta, Ya nadie puede salvarlo del ángel de la muerte.