Elizabeth II

Pude verte moverte en el vientre de tu madre mi hija. La pantalla reflejaba un rostro semejante al mio. Y senti mis piernas aflojarse en euforia absoluta. Este amor que te tengo tan poco egoista me asusta.

Nunca antes he sentido esta angustia que siento. Al pensar que algo pudiera dañarte me muero. Luchare sin descanso para que tu vida, en todos los sentidos supere a la mia.

Imagino tu rostro y siento alegria. Ahora que te espero no le temo a la vida. Sin embargo mi temor a la muerte es mas fuerte. Pido a Dios el dia de tu boda poder estar presente.

Te ame desde el dia que tu madre me anuncio tu existencia. Para ti en mi alma solo tengo pureza. He amado antes pero como a ti a ninguna. Me han amado entes, pero tu amor jamas pondre en duda.

Pasaran los dias y vere tu rostro. Ya no mas en una pantalla fria. Sentire tus cachetes rosados junto a mi hombro y finalmente podre leerte esta tu humilde poesia.

 

Junior O.

Un poema que derrocha ternura, muy emotivo

Un saludo cordial de

Jaime

 

Muchas gracias Jaime!