emociones

Los vasos se quiebran y en mi se desata una frustracion mas potente de la usual, de esa forma se quebro mi alma alguna vez pero ya no recuerdo en que punto sucedio, recuerdo las primicias de mi infancia en las que siempre destaque por ser alguien sumamente soñadora pero eso contrastaba con una persona exageradamente emocional, aveces sentia que el amor que albergaba mi pecho podria asfixiarme hasta el punto de hacerme temblar de miedo por sentir algo de forma tan ferviente, era tanto asi que terminaba por alejarme de las personas por miedo a que mi amor fuera mas grande que el de ellos y al final terminara siendo la abandonada, sucumbi a mi miedo incontables veces, el enojo podia convertirse en un incendio incesante que perturbaba mi alma en desesperacion y no lo podia controlar, la felicidad no era felicidad, era en cambio un ataque de euforia que me consumia y llegaba a ser tan invasiva y hermosa que mi corazon no podria con tanta alegria, el dolor para mi se hacia desesperante al punto de desear vehemente terminar con mi ultimo suspiro para no consumirme por el. Por años, desde las primicias de mi infancia fui de esa forma y no tengo el conocimiento de que lo pudo causar.

Las emociones me inundan mas de lo usual, tanto que soy una bomba explosiva a punto de estallar, en alegria, en euforia, en dolor y en tristeza, afortunadamente soy racional y en la mayoria de ocasiones se controlar el incendio, aveces no controlo lo exagerado de mi sentir y soy como un fosforo, lloro de felicidad, los ataques de euforia repentinos son inminentes y no es necesario que un estimulo externo los cause.

Mi alma se incendia en felicidad cuando veo la luz del sol, jamas lo entendi, hasta que cumpli dieciochos años y un especialista me diagnostico con trastorno limite de la personalidad, al principio no crei en sus palabras pero con los años me di cuenta que sentir de esa forma no era normal.