En la cena

La despedida perfecta señor O´brain, está usted esperando ese discurso, así que miente, roba la corona, extiende esas telas en oro, mancha la ropa, ahora descuidado bajo la luna que en tu egoísmo esta la mesa del olvido, el curativo examen de la mimosa parte de tu cuerpo. Extiende esa mano.
Esa capa de ozono es transparente fijamente me mira a los ojos, descrita por el sur o el oeste, casi permanente esta un crucifijo de tu parte, la biblia, eso es que la hora 34 es otra caja de calcetines a tu lado, como rostro oculto, incubado por el centro de tu existencia; échale la mano.
Mi mano derecha (sur 7/27), esta hora desaparecida, este ocupo el trono, verde, azul, negro, esta perfecta casa que ahora encuentra esta descrita por el moro en soles, incas, sacerdotes. Que mero proclamo de la juventud inca en los huesos de la mirada; perfecta. Hecho puro oro, hasta que duerma.
En el sol duerme, ahora ya, esta es la edad agrícola, tu tienes el deseo de esa mano del cofre, o la cabeza del que ordeña; esta explícito en mi conocimiento estar escrito. Miente, gana, quita, esto tiene tu nombre.
Que ahora lleva, que tiene esta parte del territorio, puedes salsearla de atrás para delante, una a una comiendo de suaves líquidos como el atole, vestido de blanco o negro, una casa encripta el nombre del sacerdote. Muros de la inocencia este cuerno es una casa, permanente, y oscura.
-Tu primero, esta suelta y despierta, esta oscuro para los amantes. Uno a uno. –Puedo con los tres, con las cuatro, ven dulce oscuridad que arrepiento en pasos como dorada luz del vaticano.-está escrita.
Llevaste a tu amor al asesino, llevaste a tu cuerpo con el asesino, ahora encuentra esa platica, y dame, tu nombre.
…escribo dentro del cedro las notas musicales apenas apareciendo entre los dulces de colores….
A LOS HUEVOS CABRONES.