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En un banco del anden

Tema en 'Prosa: Generales' comenzado por joanmoypra, 18 de Agosto de 2013. Respuestas: 0 | Visitas: 449

  1. joanmoypra

    joanmoypra Poeta que considera el portal su segunda casa

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    EN UN BANCO DEL ANDEN
    Hoy desde el andén escribo, un cuento que me contaron, unos que no regresaron al lugar de donde partieron, pues en el tren que subieron con la Parca se sentaron. Eran vagones como los muchos, que vemos todos los días, acercando nuestros pueblos por las paraleles vías. Ahora es su velocidad la que más nos interesa, no importa seguridad, lo que importa es su fiereza, y por llegar lo antes posible muchos pierden la cabeza; sin llegar nunca a saber el valor de la belleza.

    Esta historia no hace mucho a todos nos sorprendió, pues en una curva sin nombre un rápido tren de las vías descarrilo, y en desgracia y pesadumbre a todo un Pueblo estremeció, dejando hondas heridas de difícil solución. Deberán pasar los años para saber las razones, de las causas por las que han dejado heridos incontables corazones; de momento son los sones los causantes del apaño, esperemos no haya amaños para enmascarar los errores, y así salvar sus escaños, aquellos que de sus engaños alimentan opiniones.

    Escribir en los andenes es una buena costumbre, pues en ellos ves la lumbre que alimenta a tantos trenes, pues si de un viaje vienes el llegar produce hambre y es comer lo que conviene, ¡Si dispones de fiambre! Veo pasar los pasajeros y sus maletas en ristre, mientras otros con su despiste parecen esos noveles toreros, que nerviosos van lanzando desde el ruedo los sombreros. Cuanta fauna va pasando si observas atentamente, pues veras como corriente cuantos a un pueblo representan, y desde el poderoso a la asistenta, todos bajan impacientes del vagón en el que se aposentaban, sin ayuda ni asistentes, eran todos penitentes y con el mismo fin, todos rezaban.

    No importa lo que se cuente, si no lo que de verdad esto tiene, aunque a veces si conviene, el salir a la palestra, para demostrar quién viene aportando lo que tiene, o quien solo busca gresca porque eso le entretiene. Dejo inconcluso este cuento, pues es parte de una vida, que busca en los sentimientos la razón que nadie olvida en este mundo de cuentos y que a vivir nos convidan, una vez que hayamos muerto y sin encontrar, de esta estación la salida.

    Joanmoypra/agosto/2013
    www.sancholanza.blogspot.com
     
    #1

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