En una noche de Luna...

El espíritu moderno se detuvo
al cortarse la energía que lo enarbola.
No hubo más luz, anocheció temprano
y el silencio se hizo amigo de las sombras.

-¿Pero, cómo?
¿Una sombra en una noche oscura?
¿Una sombra si no hay luz que la genera?
-Querido amigo te olvidas de la luna
¡Esa noche briló singularmente!

Fue así sin luz, sin ruidos ni carteles
que emergieron quizas desde el medievo
vengándose quizás del espíritu moderno
tantos espíritus que el hombre lleva adentro.

Y en ese silencio tan amigo de la sombra
y en esa luz radiante aunque débil de la luna
aulló el hombre lobo en la montaña
cantó el grillo como no lo había hecho nunca...

...se concretó ese beso tan soñado
y florecieron el perdón y las palabras,
también salió el vampiro de su tumba
y del hombre, a la soledad el miedo.

Salió el consejo más profundo de las madres,
despertó el sueño más profundo de los niños
ese que estaba en situación de coma
por las pantallas de mil dispositivos.

frío y calor ante la luna se encontraron
es decir hombre y mujer formaron nubes
y las cigüeñas cual lluvia regalaron
al que es de padre y madre una síntesis

¡Cuántas cosas pasaron esa noche
en que la luna no tenía competencia!
el espíritu moderno tenía franco
¡El hombre lo de adentro sacó afuera!