1. Invitado, ven y descarga gratuitamente el cuarto número de nuestra revista literaria digital "Eco y Latido"

    !!!Te va a encantar, no te la pierdas!!!

    Cerrar notificación

Entrevista a Michio Kaku, autor de física de lo imposible.

Tema en 'Prosa: Generales' comenzado por sergio Bermúdez, 14 de Agosto de 2009. Respuestas: 0 | Visitas: 1092

  1. sergio Bermúdez

    sergio Bermúdez Poeta que considera el portal su segunda casa

    Se incorporó:
    26 de Diciembre de 2008
    Mensajes:
    3.101
    Me gusta recibidos:
    911
    Entrevista a Michio Kaku, autor de Física de lo imposible

    El eminente físico de la Universidad de Nueva York y uno de los divulgadores científicos más prestigiosos del mundo habla de su último libro, Física de lo imposible. Por Eva Orúe

    Cuando vemos las viejas películas o releemos los libros viejos de ciencia ficción, nos damos cuenta: muchos de los artilugios y las posibilidades que entonces parecían únicamente fruto de la imaginación desbocada de guionistas y escritores, y que eran motivo de risa para los científicos, forman parte de nuestra vida cotidiana. Otros logros se nos han resistido hasta hoy, pero ¿por cuánto tiempo? ¿Podremos, en un futuro más o menos próximo, ser invisibles, viajar en el tiempo, teletransportarnos? Michio Kaku parece convencido de que sí…

    Física de lo imposiblepodría formar parte de la campaña publicitaria de Nike, usted también dice “Impossible is nothing” porque la historia de la ciencia nos demuestra que, en efecto, nada es imposible…

    El objetivo del libro es demostrar que la imposibilidad es relativa. Si ve una película de ciencia ficción y dice que algo es imposible, lo que está diciendo en realidad es que ése algo imposible lo es en un determinado momento. Tenemos que separar lo que es físicamente imposible de lo que es sólo un problema de ingeniería muy difícil de resolver. Así que hice una lista de los artefactos que había visto en las películas de ciencia ficción y me pregunté a mí mismo: ¿cuándo podrán ser factibles estas tecnologías? Para mi sorpresa, descubrí que más del 90% de lo que se ve en esas películas es físicamente posible, aunque difícil de conseguir.

    ¿Por qué sus colegas desechan determinadas cosas por imposibles cuando saben mejor que nadie que el progreso es imparable? Los creía más prudentes…

    A finales del siglo XIX, un gran físico, Lord Kelvin, declaró que eran imposibles cosas como los aviones y los rayos X. Muchas de sus predicciones eran erróneas, tuvo la desgracia de vivir justo antes de las dos grandes revoluciones del siglo XX: la relatividad y la teoría cuántica.

    La primera es la teoría del big bang, los agujeros negros, y el espacio-tiempo, es decir, la teoría de lo muy grande. La segunda es la teoría de los átomos y las partículas subatómicas, es decir, la teoría de lo muy pequeño. Juntas, suponen la suma total de todo el conocimiento físico en un nivel fundamental. Así que las predicciones de Lord Kelvin eran erróneas porque no se percató de que una nueva física estaba a punto de nacer. Hoy, comprendemos bien la relatividad y la teoría cuántica, por lo que las predicciones son más fiables.

    Pero incluso en la actualidad, algunos científicos sacuden la cabeza y dicen que no, que cosas como viajar a otras estrellas son imposibles, que las distancias son tan grandes que los viajes interestelares son imposibles… aunque si pensamos en una civilización de dentro de mil o un millón de años, podemos imaginar una nueva física, y entonces los viajes interestelares se convierten en una posibilidad bien real.

    Por todo eso, la pregunta clave es: ¿es posible que tecnologías hoy imposibles lleguen a ser posibles?

    A quienes aún no han leído su libro deberíamos explicarles que usted divide las imposibilidades en tres categorías. La primera, las que hoy son imposibles, pero no violan las leyes físicas. Tengo más de 40 años, ¿viviré para verlas?

    Sí. La investigación sobre la invisibilidad avanza extraordinariamente rápido desde el anuncio, hace tres años, en la Universidad de Duke de que es posible hacer invisible un objeto mediante la radiación de microondas (ver anunció aquí). Y poco después, científicos de Berkeley, Cal Tech y otros laboratorios demostraron que la luz visible también puede actuar así. La invisibilidad total puede estar a sólo unas décadas de distancia. Y no sólo eso:

    Los científicos pueden teletransportar átomos de cesio, rubidio y partículas de luz. En una década, teletransportarán moléculas, quizá incluso AND y tal vez genes o virus.

    Ahora mismo pueden proyectar los pensamientos de un cerebro humano en un ordenador, de manera que es posible navegar por la web sirviéndose sólo del pensamiento puro. Además, los científicos están haciendo un diccionario que convierte señales cerebrales MRI (Magnetic Resonance Imaging, Imagen por Resonancia Magnética) en pensamientos cuando pensamos sobre algunos objetos, emociones, algunas palabras, etc. Al final, podremos tener un diccionario de los pensamientos bastante completo.

    Pistolas de rayos, jet packs como los de Buck Rogers y coches voladores como los de Los Supersónicos son posibles ya hoy en día, el problema es que necesitamos una fuente de energía portátil para hacerlos funcionar. Pero una superbatería que se base en la nanotecnología puede ser una realidad en las próximas décadas, y entonces todos esos avances serán realidad.

    Volvamos a su clasificación. Las imposibilidades de clase II se hallan al límite de nuestra capacidad de comprensión, y pueden tardar años en hacerse realidad. Pero nuestros descendientes quizá puedan viajar en máquinas del tiempo y realizar viajes por el hiperespacio…

    Los físicos solían reírse del warp drive [en Star Trek, propulsión por curvatura o motor de curvatura, una forma de propulsión superluminal] porque violaba el principio de Einstein según el cual no se puede romper la barrera de la luz. Pero hace unos 10 años, encontraron una laguna en las ecuaciones de Einstein que puede hacer posible el warp drive, tal y como sucede en las películas. En lugar de naves espaciales viajando a las estrellas, podremos hacer que las estrellas vengan hasta nosotros, por ejemplo, comprimiendo en espacio que hay delante de nosotros y, simplemente, saltando hasta las estrellas.

    Viajar en el tiempo, nos damos cuenta ahora, es también una solución a las ecuaciones de Einstein. La razón por la que no tenemos máquinas del tiempo y motores warp drive es, al menos en parte, por el problema de la energía: necesitamos una cantidad enorme de energía para mover esas máquinas, tanta como la que genera un agujero negro. Ésa es la razón por las que éstas son imposibilidades de Clase II, porque requieren una cantidad cósmica de energía. Pero, aparentemente, no violan leyes físicas.

    La clase III es la integrada por las tecnologías que rompen leyes físicas, al menos tal y como las conocemos ahora. Usted examina las máquinas de movimiento perpetuo y la precognición. ¿Son imposibles o, una vez más, nada es imposible?

    Las máquinas de movimiento perpetuo violan tanto la teoría de la relatividad como la teoría cuántica. Pero eso no significa que sean totalmente imposibles, sólo quiere decir que violan todas las leyes físicas conocidas. El origen de la conservación de la energía es muy profundo, cualquier ley física que no cambia con el espacio o el tiempo automáticamente conserva energía. Sabemos que las leyes físicas no han cambiado en millones de años o billones de años luz observando una estrella que ha viajado desde el Big Bang y, al cabo, ha sido captada por nuestros instrumentos, cuando encontramos que el espectro de radiación en esta “luz fósil” es idéntico al de la luz que tenemos hoy. Esto significa que las leyes físicas no han cambiado a lo largo de distancias y periodos de tiempo cósmicos y, por lo tanto, que la energía se conserva a lo largo de esos espacios y tiempos cósmicos.

    Star Trek y Star Wars aparecen en su libro una y otra vez. ¡El Capitán Kirk y Han Solo deberían recibir derechos de autor!

    También Flash Gordon. Cuando era un niño, me gustaba ver la serie de televisión de Flash Gordon, que me introdujo en un universo de posibilidades. A nosotros, los físicos, no nos gusta admitirlo pero muchos vemos ciencia ficción en nuestro tiempo libre, y de niños nos inspiró.

    Por ejemplo, Edwin Hubble, quizá el más grande astrónomo del siglo XX, parecía destinado a ser un abogado de pueblo en Missouri. Pero recordaba con cariño los cuentos de Jules Verne que había leído de niño, y abandonó su carrera, obtuvo un doctorado en astronomía y llegó a descubrir el universo en expansión.

    Y Carl Sagan encontró inspiración en la lectura de las hazañas de John Carter de Marte, que buscaba a la princesa Dejah Thoris en las arenas del Planeta Rojo. Hasta su último suspiro creyó que había civilizaciones inteligentes en el espacio.

    Se diría que la ciencia imita a las películas y la literatura de ciencia ficción.

    A veces es cierto que la ciencia ficción inspira a la ciencia. El caso más famoso es el de la bomba atómica. H.G. Wells predijo la bomba atómica en 1914 en su novela The World Set Free (La liberación mundial), donde escribióque un científico descubriría el secreto de la bomba atómica en 1933. En la vida real, el físico Leo Szilard leyó este libro en 1932, y la obra fue su inspiración para afrontar el problema. En 1933, descubrió el proceso de reacción en cadena. Cuando esta teoría fue confirmada, Szilard convenció a Einstein para que éste escribiera su famosa carta al presidente Franklin Roosevelt, urgiéndole a construir la bomba atómica. El resto es historia.

    Está usted realizando una serie basada en este libro. ¿Qué espera de ese trabajo?

    Estamos rodando 12 episodios para el Science Channel, que se emitirán a partir del mes de noviembre. Hemos grabado ya los capítulos relativos a las pistolas de rayos, los campos de fuerzas, las astronaves, los robots… Cada capítulo del libro, más o menos, se convierte en un episodio de 30 minutos que yo presento. Y créame, es un regalo visitar los laboratorios de los científicos más importantes del mundo, los que están construyendo el futuro en sus laboratorios.

    De Carl Sagan a Stephen Hawking hay una extraordinaria estirpe de científicos que han sabido acercar la ciencia al común de los mortales. El secreto del éxito es…

    Está en mi frase favorita de Einstein: “Si una teoría no puede ser explicada a un niño, probablemente no vale la pena”. Esto significa que todas las grandes teorías pueden ser explicadas mediante dibujos muy simples que hasta un niño entiende. La relatividad, por ejemplo, puede ser explicada mediante cohetes, ascensores, trenes, etc. Pero, con demasiada frecuencia, los físicos nos perdemos en ecuaciones y en nuestra jerga. Así que simplificar las ecuaciones y mostrarlas en dibujos sencillos es un arte practicado por todos los grandes físicos, como Newton y Einstein.

    Volvamos por un momento a las relaciones entre ciencia y ciencia ficción. ¿Cuáles son sus escritores y realizadores favoritos, aquellos que le espolean?

    Mi escritor de ciencia ficción favorito es Isaac Asimov. Leí su saga de la Fundación de niño y aprendí una gran lección. La novela se desarrolla dentro de unos 50.000 años, cuando los humanos han colonizado la galaxia pero el imperio galáctico se está desmoronando. Aprendí que tienes que dejar suelta tu imaginación para ver cómo podría ser la ciencia dentro de 50.000 años. Con demasiada frecuencia los científicos dicen: “esto es imposible” cuando creen que la tecnología lo hace imposible en un plazo de 100 años. Pero en un plazo de 50.000 años entran en juego leyes físicas completamente nuevas.

    Algunos de las series de televisión más famosas abordan asuntos de los que usted se ocupa en sus libros. Héroes, por ejemplo, o Perdidos. ¿Las sigue?

    Vi casi todos los capítulos de la televisiva Star Trek y muchos otros programas de ciencia ficción. Una revista científica me pidió que analizara Perdidos, y encontré que la serie era muy convincente. En uno de los episodios, una mujer explica la razón por la que acontecimientos tan extraños ocurren en una isla, los científicos descubrieron que un punto geográfico tenía propiedades especiales que formaban un vínculo espacio-tiempo con otros lugares clave alrededor de la tierra.

    Cuando esta revista me pidió que explicara esto, mencioné una posibilidad: que un meteorito de materia negativa aterrizara en la isla y creara todas esas extrañas anomalías en espacio y en el tiempo. Si usted inserta la materia negativa en las ecuaciones de Einstein, por ejemplo, entonces los viajes en el tiempo y los through wormholes [atajos de espacio-tiempo curvo] son posibles. Como en las series.

    Si usted pudiera llegar a ver una, y sólo una de las posibilidades de las que habla en su libro... ¿Cuál elegiría?

    Elegiría los viajes por el hiperespacio. Trabajo en algo llamado “teoría de las cuerdas” que puede ser la teoría final, la teoría que se le escapó a Einstein durante 30 años, la teoría que podría permitirnos “leer la mente de Dios”. Lo peculiar de esta teoría es que está definida en las dimensiones 10 y 11.

    Pues bien, este verano, empezaremos a probar si estas dimensiones pueden existir con el Large Hadron Collider. Esperamos poder producir ‘sparticles’ o superpartículas con esa máquina, que representa vibraciones más altas de minúsculas supercuerdas. Si se encuentran ‘sparticles’, estaríamos ante un momento decisivo en la historia de la física. Las ‘sparticles’ son el principal candidato para explicar la ‘materia negra’ que constituye el 85% de toda la materia del universo, y podrían también demostrar que la teoría de las cuerdas es correcta, y que vibran en el hiperespacio.
     
    #1
    Última modificación: 14 de Agosto de 2009

Comparte esta página