Espacialidad

Los espacios se auto regeneran, se impulsan e incitan dentro de una corriente capciosa, que los acumula y disocia con simple simultaneidad, colocándolos en incomparables situaciones, que conviven indistintamente, en intra captaciones, puntos de fuga y disparadores en diferentes direcciones.
No precisamente cuentan con una especificidad determinada, se forman espontáneamente, entre los miles de otros espacios; la sonoridad de su espacialidad, delimita un amorfismo único e irrepetible, en consecuencia, el resultado no es otro que, una exuberancia e hiperrealismo prolongado a una potencialidad inimaginable… solo comparable a una abstracción de los sentidos funcionales a la emotividad de un episodio de estrabismo.
En cada repetición, un mismo espacio, soporta su peso inexistente, y sin historicidad, acto seguido, deambula trémulo, y abstracto confirmando su inexistencia genealógica, sometiéndose a disímiles estudios filosóficos y estadísticos, con la certeza de su extrema inexistencialidad informe, incolora e insonora que resiste cualquier formato de análisis.
Desde una no creación, modificará imperceptiblemente su extraña frecuencia, nunca lo sabré, tampoco reconoceré su textura ni su peso, para mi incomprobables por una intactilidad que me supera en tecnología.
Solo se que estoy acostumbrado a vivir y a comulgar con su extrañeza puntual y sensible, es mas, mi única comunicación, es mi bendita percepción, que lo convierte en un sentido a fin a cada circunstancia de todos mis momentos y en la transformación lo digiero como pensamiento, idea, impulso, reflejo, razonamiento, sentimiento.
En la medida que pueda controlarlos, podremos convivir, de lo contrario quedaré expuesto a su dominio y viajaré hacia su confinidad enfundado en mi mas surreal paranoia.