1. Invitado, ven y descarga gratuitamente el cuarto número de nuestra revista literaria digital "Eco y Latido"

    !!!Te va a encantar, no te la pierdas!!!

    Cerrar notificación

Espejos oscuros (x)

Tema en 'Prosa: Ocultos, Góticos o misteriosos' comenzado por Cuéj, 21 de Febrero de 2014. Respuestas: 0 | Visitas: 964

  1. Cuéj

    Cuéj Poeta recién llegado

    Se incorporó:
    17 de Febrero de 2014
    Mensajes:
    16
    Me gusta recibidos:
    4
    Anteriormente, cuando sólo nos teníamos, cuando la eternidad se proyectaba en tu mirada, cuando tú eras el sol que nacía, entonces… yo era feliz.
    Anteriormente, sin ráfagas de sombras en mi pecho, sin zonas rotas en mi corazón mendigo, sin el ocaso de tu mirada sangrante, cuando tú solo eras mi hermosa amada, yo era naturalmente feliz.
    ¿Sinceramente brotará una lágrima de entre mis cantos extenuados?
    Yo conservo de tus ojos el brillo, de tu pelo el perfume, el sabor de tu boca, la gracia excelsa de tu nariz. Yo soy el que en el pasado, está amando un Amor rezagado, en la efluvia forma de lo sutil.
    ¡Basta ya de nociones ambiguas! ¡Siniestra Belleza, te imploro el alma que has desdeñado; devuelve los ritmos vitales a éste mi cuerpo exánime; abraza, por fin, este prematuro cadáver que sólo sabe sollozar!
    ¡Oh Silencio!, fríamente oscureces mi espíritu que abstraído discurre esa mirada que desde la Nada me observa lánguidamente ¡Respetemos esas lágrimas que se han solidificado en los vientos helados del Hastío!
    Cuando por causa de un dolor inconmensurable, la mente despeñada ve peligrar la cordura en el círculo vicioso de los embrollados pensamientos, del rojizo cerebro que en la fragua de los metales encendidos se calcina, imagina un témpano anclado en un piélago marmóreo, y nivelando lo opuesto, como un promedio, toma entonces, una postura eficaz.
    Así, entonces, relegando nuestro cuerpo a su inútil existencia, los sentimientos (las banalidades cíclicas que nos circundan) a su total indiferencia, seremos únicamente conciencia: la ínfima parte a la cual podremos sustraernos
    Anteriormente, entonces, rompiendo las redes del silencio vastísimo, el sonido sutilísimo que a ningún tímpano accedía, fue de mi dolor su himno más notorio, y en voz callada confesé mi idolatría a esos ojos alejados. ¡Oh, Musa de los cantos tristes, ruega por mí y por lo que repercute en mí como un vacío! Yo te imploro renueves las flores marchitas con tus manos temblorosas y de tu forma oscura reemplaces a la que ya no existe. Besa con tus labios helados mi frente consternada de pensamientos febriles. ¡Dame la insensibilidad como una bendición, que aleje al fin de mí, el sufrimiento!
     
    #1

Comparte esta página