1. Invitado, ven y descarga gratuitamente el cuarto número de nuestra revista literaria digital "Eco y Latido"

    !!!Te va a encantar, no te la pierdas!!!

    Cerrar notificación

EXTRAÑA BOGOTANA (cuentito triste)

Tema en 'Prosa: Melancólicos' comenzado por mariano dupont, 11 de Junio de 2014. Respuestas: 0 | Visitas: 356

  1. mariano dupont

    mariano dupont Poeta fiel al portal

    Se incorporó:
    12 de Junio de 2011
    Mensajes:
    915
    Me gusta recibidos:
    234
    EXTRAÑA BOGOTANA(un cuentito angustiado)

    Está cayendo el sol del domingo en el anochecer colombiano, Cundinamarca se pone en sombras, el pájaro copetón llena la tarde bucólica con su clara canción y Juan Andrés está saliendo de la plaza "La Santamaria" de Bogota después de una jornada de paso dobles, de corridos y de estridente clarín...Y de la bota con el persistente chorro de vino.
    Ahí empezó para Juan la historia de esta borrachera.
    Los carteles rojos y brillantes lucen ampulosos de colores con las últimas claridades del dia...El niño de la Capea...Palomo Linares y Paco Camino exhiben en el afiche sus perfiles quebrados...
    Las brujas terribles que cuidan de los maleficios a los toreros están atentas a los malos augurios, a los gatos negros, a los curas con sotana y a las mujeres que acechan a los diestros.
    Palomo a regalado un toro, y es un día de gloria con cuatro vueltas al ruedo, las dos orejas y el rabo...Y las capelinas de las damas luciendo al sol, que se va, como bellas y coquetas aves de los cielos.
    Ajeno a la devoción de los toros, el argentino Juan Andrés llegó por curiosidad a la plaza, y comenzó con lo que encontró, por eso de que donde vayas haz lo que vieres, y siguió con la inercia del momento...Que era la del vino corrido.
    Siga la fiesta brava de los tragos...Siga con la bota en la plaza...Y siga después en la tasca con mas vino tinto de Andalucía y con jamón de la serranía.
    Y así siguió para Juan la historia de la misma borrachera.
    Finalmente todos los bares son iguales, se olvidan los toros, cualquier borracho es tan bueno como cualquier otro y sigue la fiesta de las copas.
    Ya bien entrada la noche únicamente quedan los mas sedientos que cada vez son menos en el peregrinar alcohólico de bar por bar.
    El hombre joven seguía la caravana en la recorrida del vino por inercia y en barrios extraños de la ciudad que no conocía.

    Perdido en la noche entre la confusión de tragos, de bares y curdas lo sorprendió el día sentado en un bar con una rubia borracha como él...En mala hora.
    La sombra se rasgaba, amanecía y Bogotá despertaba estremecida, cual despierta una amante sosegada al otro día.
    Todo empezó de maravillas entre la dama nocturna y el gaucho perdido y para celebrarlo emprendieron una nueva vuelta de copas en esa madrugada entre borrachos trágicos y solitarios náufragos sin buque hundido...
    Le hablaba Juan a la colombiana de playas paradisíacas, de mares de ocho colores, de tesoros de piratas y de románticos amores con la Luna colgada de las palmeras...Y de los hipocampos retozando en noche cálida de mar serena.
    El cielo ya estaba azul y un alba deslumbrante enjoyaba las nubes vaporosas.
    Oscura bogotana...¡Extraña aparición!, bañada por la primera luz de la mañana parecías el alma del misterio y del dolor.
    Vagabunda tras un sueño, un ideal en tus ojos y un sol y en tu alma una loca ilusión.
    Enigmática mujer...
    Vaya saber porque reacción comenzó a entregar a Juan, billetes arrugados, y esté, muy borracho,como lo mas natural del mundo los iba guardando con la misma facilidad que los recibía.
    (fin de primera parte)


     
    #1
    Última modificación: 11 de Junio de 2014

Comparte esta página