Furia nocturna

Bajo la promesa de un nuevo amanecer, de una nueva aventura, de un sueño por realizar, levanto el vuelo agitando mis alas, primero lentamente despegando mis patas poco a poco del suelo y levantando un poco de polvo bajo mis alas que van abriendo cada vez mas y mas, impulsadas por el deseo de un destino por alcanzar, levanto la mirada en la que destellan los rayos de sol entre las copas de los arboles, las montañas se asoman y cada aleteo me lleva mas y mas alto, un grito se escapa por mi garganta interrumpiendo la paz de aquel viejo paisaje de sueños, un grito que dice al mundo que estoy vivo y que el cielo es mi reino.
Despliego mis alas orgullosas de aquel vuelo que retoma el destino que debo alcanzar, el horizonte y mas allá es la frontera que hay que cruzar, las montañas majestuosas se levantan a mí alrededor y los pinos son fieles testigos del vuelo de la sombra que cruza el firmamento con esa mirada segura de alcanzar su destino.
Muevo las alas de un lado a otro haciendo acrobacias en el aire dignas de la sombra alada, agudizo mis sentidos para entrar en una barrena y terminar en picada, haciendo gala de todos mis sentidos para volver a gritar al mundo que estoy vivo, que estoy aquí, que soy la sombra alada.
Al acariciar con mis garras el agua del rio que cruza ese valle, se levanta una estela a mi paso, se levanta dejando atrás los temores y un pasado absurdo que me llevo a este punto en el vuelo de mi vida.
Gritos de furia desgarran aquel rocoso valle, para gritarle al mundo que estoy vivo, que soy la muerte en el aire, que tengan miedo, que desde el aire los vigilo.
Una vez más despliego mis alas, me elevo hacia el infinito para sentir el aire que acaricia mis alas negras y me lleva mas allá de las cascadas de la ilusión, cruzando por el bosque del olvido y encontrando de frente los montes del destino, pasando cerca del rio de la alegría y sin olvidar el valle de las sombras.
Te veo en el tiempo y en el espacio, no tienes escapatoria, mis garras están listas para acariciar tu suave piel y dejar un rastro de mi inquisidora visita, mis alas se despliegan mostrándote el poder de la velocidad y la agilidad en mis músculos te invitan a huir sin sentido. De mi pico sediento se escapan gritos de advertencia mientras te llenas de miedo y la sangre se te congela a mi paso.
Extiendo mis alas negras y mi cuerpo se erige orgulloso, mis garras se preparan para la batalla y de mi pico salen gritos de furia, gritos que cantan victoria, gritos que anuncian me llegada, que soy lo mas majestuoso y poderoso que surca el cielo, que soy la muerte en el aire, tenme miedo pues soy la furia en el aire, soy la furia nocturna.