Hoy no

Traigo la culpa entre los dientes,
ya no necesito succionar migajas
para nutrir la leyenda que sólo
amaneció en mi pecho
y nunca abandonó estas letras.

Buscándole raíces al milagro de tus ojos
tu alma me descubrió desnuda,
desvestida de sonrisas,
pródiga de felicidades
yo,
queriendo creer en la verdad de tu nombre
en la paz que se derramaba de tus poros
sobre la paralítica constelación
que habitaba en mis manos.

Yo,
que vivía en el sueño de los pájaros
mientras versos iracundos
se aflojaban de los labios
para protegerme del molde de tus brazos.

Ésta soy hoy:
vivo y muero mil tragedias
en la incertidumbre de tus silencios,
con los pulmones cubiertos de neblina
y lágrimas tartamudas
acribillando cuadernos,
asesinando memorias desde el vientre.

La soledad se viene sobre los párpados
hoy no me apetece arder en tus fantasías.











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Wow...cuánta sensibilidad desbordada...expresividad que sobrecoge...
Me ha gustado mucho leerte amiga...te abrazo con todo mi cariño...

 

Hermosa poesía , saludos

 

"Traigo la culpa entre los dientes" me encantó esa frase, buenisma obra

 

Hermoso, fantastico poema K-rolissa, ¡Tu sensibilidad al poder! Me gusto inevitablemente. Un abrazo. Paco.

 

Mil gracias Darkness por tu alentador comentario, me agrada saber que ha sido de tu gusto el escrito.
Abrazos mil!

 

Muchisimas gracias Sebastian, un gusto verte por aca.

 

Muchismas gracias Benjamin, encantada de verte por esta lineas. Abrazos.

 

Mil gracias Paco, por tu amable comentario. Abrazos mil!