Hoy.

Una copa menos, otro año que se va…
Un horizonte pleno en un amanecer tardío, lleno de sol.
Recuerdos marinos de un mundo lejano
El silencio de las profundidades, el frío de cada invierno
La extraña sensación del descenso relajado y seguro
En un medio conocido, familiar, siempre enigmático
La humana postura de la mirada a futuro
Y los escasos momentos del conocimiento del hoy.

Nostálgicos suvenires colgados de una pared húmeda y gastada
Como viejos trofeos de guerras pasadas
Tantas historias, tantos momentos
Infinitos personajes adornando el camino recorrido.
Siguió girando, una y otra vez, cada día y cada año
Nunca se detuvo a pensar, a sentir o a esperar
Una extraña mirada hacia la nada, con una leve sensación de bienestar
Sumadas todas las humanas necedades de lo obvio, tan tangible.
Animales de calva evolución, figurando como seres mitológicos en un mundo sin igual
Conectados por los sueños, las alegrías, las esperanzas.
Otra marea, diversos dibujos en ese brilloso y dorado suelo
Nada se compara a ese gigante azul.