Huir

HUIR

Me jure que no pasaría, que no me volvería a dejar atrapar. Pero los juramentos son la seguridad de que lo harás,que tropezarás de nuevo. Era libre, volaba cada mañana, cantaba con otras canciones de erotismo y pasión. Engañaba las mentes de toda aquella que deseaba, sabía lo que querían, sus deseos, sus pecados. Daba forma a sus peticiones indecentes. Jugaba con los sentimientos de unas mujeres insatisfechas que sólo querían saber más, más de la vida, más de los hombres. En sus miradas podía leer su mente esclava de mis pensamientos, de mi cama. Jure que no pasaría. Un día fui yo quien quiso saber más, y ella más de mi. Unas manos que me acariciaban como nadie, con el calor de todas juntas. Me sentía tan bien, tan relajado, que me dormía en sus piernas, abrazado, sonriendo, me sentí feliz. Es más, tenía la sensación, de que esa mujer era una parte de mi, perdida hace mucho. Entonces, note que perdía el control de mi vida, de mis planes. Enamorarme otra vez no. Pasos atrás, huir, correr. No puedo pasar por otro calvario. Muchas grietas para este corazoncito que ya navega ladeado sin un norte, sin rumbo, sólo flota en el mar, solo, muy solo.

 

Un corazón solitario y adolorido. Hay que recomponer los pedazos para reencontrar el amor. Saludos cordiales.