La casa maldita (parte 2)

Robert despertò sobresaltado,se habìa quedado dormido sobre el libro que habìa empezado a leer.Pronto,alguien golpeò la puert.Por deducciòn supo que era Magda,se levantò y la abriò:efectivamente era ella,y ahì estaba con dos tazas de cafè.La hizo pasar:
-Ponte còmoda.
Magda obedeciò y acto seguido dijo:
-Lo siento Doc,sè que es tarde,pero querìa compartir un cafè con usted.
-No es nada,te lo agradezco,me he quedado dormido.
Robert contemplò por un momento la belleza de la mujer que estaba sentada frente a èl:sus labios carnosos,su cabello rubio y con rulos,sus ojos grises..quedò anonadado,pero actuò para que no sea evidente y mirò el reloj:eran las cuatro de la mañana.
Comenzaron a hablar animadamente,hasta que algo sucediò entre ellos,una quìmica especial.
-Doctor,es usted un seductor consagrado.
Robert se parò y fue hacia ella:
-Magda,estoy profundamente enamorado de ti.
Y en el silencio intenso de la oficina,del edificio,sus cuerpos se unieron concretando un secreto mortal.
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Esa tarde,lloviò torrencialmente,fue una tarde gris.Robert visitò a los pacientes,sin la compañia de Magda,que luego de lo sucedido en su oficina,habìa desaparecido del edificio.Por la noche,volviò a su habitaciòn y cuando el reloj marcò las 12:00 de la noche,volviò a salir para develar algunos interrogantes que la noche anterior no pudo aclarar.
Comenzò a caminar,solo,por los pasillos del neuropsiquiatrico,sin la compañia de Magda,y sentìa miedo.
Se dirigiò al Area Restringida,resultò extraño que el oficial no estaba en su sitio,algo raro pasaba,ingresò y empezò a caminar,las personas estaban alborotadas,por una macabra broma del destino,la puerta de la celda de la chica que Robert habia visto masturbàndose,estaba abierta.Por un momento,el tiempo se congelò,Robert quedò perplejo ante la escena que estaba presenciando:el oficial estaba violando a la chica.Por una milèsima de segundo,las miradas se cruzaron,Robert empezò a correr,un brazo saliò de una de las celdas,intentando ahorcarlo,y cuando pensò que se quedaba sin aire,se zafò y siguiò corriendo.
Tomò un pasillo deshabitado,las luces titilaban,llegò a una habitaciòn,sin aire y shockeado,volviò a presenciar otra escena fatal:en una silla elèctrica estaba sentada una persona,muerta por la electricidad que habìan descargado en su cuerpo,y a Magda,volviendo a accionar la palanca.
Por otra parte,en el piso habìa personas muertas,mutiladas en un gran charco de sangre.Las enfermeras quienes estaban a cargo de los pacientes,tomaban a las personas que estaban vivas,completamente medicadas y hasta sedadas,y con saña,con maldad,les clavaban agujas de tejer en los ojos para luego mutilarlos.
Robert saliò corriendo,sin saber que hacer,desorientado...Volviò a su habitaciòn,tomò las maletas que no habìa desarmado y saliò corriendo en busca de una salida que lo sacara de ese infierno...
En ese momento,en que habìa visto la puerta de salida,se cruzò con Magda,quien con una sonrisa burlona y un tono de voz irònico dijo:
-¿Adonde vas Robert?.Quiero que hagamos el amor otra vez.
Robert gritò desesperado:
-¡Maldita perra!.
Cuando se dispuso a cruzar el umbral de la puerta,sintiò un golpe seco en la cabeza y se desvaneciò.