La ciudad de mi alma.

Vagaba por las calles del siempre.
Mirando en el reflejo de los charcos una persona diferente.
La pesadumbre de mis esperanzas tropezaban con los mismos escalones del pasado.
La desesperación por querer llorar para sentirme vivo.
O que el rayo prometido de la felicidad alumbre mis creencias de amor.
Yo ya no se, si dejar pasar mas el tiempo de mi nostalgia o salir a imitar a la sociedad.
Yo ya no se si buscar un perro y compartir mi soledad, o correr a burlarme de los desolados.
Los parques florecidos, los niños despreocupados, las parejas ejemplares y los abuelos sabios.
Me dan a entender que mi alma es la ciudad morriña,
donde mis sentimientos son los desolados ,mis ilusiones las calles del siempre
y mi papel del perdedor mi certidumbre por soltar el llanto.