La espera

La espera

Esta tarde tengo a la paciencia
perdiéndose en un bosque sin salida;
tengo al morbo diciendo obscenidades
al oído derecho; tengo al tiempo
apretando tornillos de mi vida;
a la razón no la veo ni en pintura
y las ganas de ser bueno se han marchado
a algún bar a beberse sus haciendas.

Esta tarde es la bola de política,
con fútbol y con planes de futuro,
que engurruño tozudo y que propulso
hasta la papelera del absurdo.

Esta tarde me olvido del olvido
y al recuerdo lo dejo en una celda
a pan y agua. Después voy y me pido
una jarra de amor para la espera.

 

Lírico detrito, no te preocupes.
Como dijo la Gladiadora, alguna vez:


<< Pulgarcito, necesitas un viajecito. >>


Yo llegué, la semana pasada, a Barcelona.

 

Un tiempo muy bien aprovechado, no siempre vamos a estar haciendo todo a la perfección. A veces debemos ser libres. Saludos afectuosos, Lírico.

 

Gracias. Saludos.

 

Tranquilo, siempre tendremos a Wichan para hacer versos de la hostia, por si acaso. Me pregunto si come algo que no sea butifarra jajajja