La Glorificación

En las nocturnas marismas de tu pérfida y cruel avaricia,recortas trozos lunares con las tijeras fúnebres del dios del abismo.A cada ponderado fragmento que recortas,ríes entrecortado con blasfemo eco de cuervo moribundo;esperando,mientras babeas de esa soberbia boca salpimentada con la sangre de la funesta muerte,al creciente y secreto arcano que esconde en el negro baúl de las desdichas la perla que fulgura sobria en toda una eternidad de efervescente obscuridad.No tienes compasión ni conmiseración.Tu acto vándalo hace estallar en una miríada de cristales rotos tu humilde y cascada conciencia moral.Y es entonces cuando te glorificas a ti mismo en el nimbo áureo del alba como tu propio dios.