la joven del norte y el joven del sur La joven del norte se sentaba todas las mañan

[FONT=&quot] La joven del norte se sentaba todas las mañanas en la ladera de aquella colina empinada, con suspiros miraba el bosque que florecía en sus ojos, un bosque que el sol iluminaba de fantasías, donde nacían mariposas, hadas y rosas. El cantar de las aves eran ángeles y sus liras doradas despertaban las flores de la mañana, nunca el verde fue tan hermoso como el de aquel bosque alto y frondoso, el roció bañaba los pies de aquella joven enjuagaba sus cabellos y entre sus labios una sonrisa la hacia soñar con adentrarse en aquel bosque.

[FONT=&quot] Al atardecer la joven regresaba a su casa solo pensaba en aquel bosque quería vivir en el, ser parte de el, de sus encantos, de sus fantasías no hacia mas que anhelar el nuevo día para volver a la ladera a contemplar el bosque que tanto le atraía.
[FONT=&quot] El joven del sur todas las mañanas iba a cazar, nada le gustaba tanto como cazar, en las tarde exhibía con orgullo sus trofeos en el pueblo, solo pensaba en cazar cuando el sol devolviera el día. Una mañana fue hacia el norte, camino muy lejos entre montañas y caminos solitarios. Cansado de tanto andar se sentó en una ladera a lo lejos miro un bosque, enseguida pensó en los animales que podía encontrar allí a lo mejor un gran venado y unos cuantos conejos, pero como ya era tarde decidió descansar y planear una estrategia para el otro día ir a cazar. Ya entrada la noche el joven seguía contemplando aquel bosque pero vio algo diferente aunque todo estaba oscuro en el seguía habiendo luz, una extraña pero hermosa canción llenaba sus oídos de algo que nunca había sentido y sus ojos no dejaban de contemplar la belleza que irradiaba aquel bosque, por un momento dejo de pensar en cazar y se dejo llevar por lo que escuchaba y veía.
[FONT=&quot] En la mañana la joven del norte corrió a la ladera, allí estaba el bosque, apretó sus manos en su pecho y sonreía muy alegre, bailaba, gritaba, entre emociones y suspiros miraba el bosque que tanto le gustaba. Aquella mañana no era igual que las de otros días, había algo, un fuerte deseo de adentrarse al bosque que no podía evitar y así poco a poco fue bajando la colina empinada que la separaba del bosque, jamás vio el peligro que eso representaba, llegar al bosque era lo único que anhelaba. Después de tanto esfuerzo llego a el, se desnudó y corrió adentro del bosque lloraba de alegría de emoción ahora era parte del bosque y se quedaría a vivir en el. El bosque era su sueño y ahora estaba en el. La joven después de mucho andar se quedo dormida, cuando despertó su alegría ya no era la misma descubrió animales muertos, aves carroñeras de aspecto sombrío, insectos que hacían rosetas en su piel y vio que no todos los arboles eran coloridos algunos no tenían follaje y otros estaban torcidos. Su alegría se convirtió en soledad y frio.
[FONT=&quot] El joven del sur despertó decidido a ir a cazar a aquel bosque, pero más allá pensaba en pasar la noche en aquel bosque ver aquella luz iluminando su cara escuchar aquellos canto que tanto le gustaron. Después de tanto caminar se encontró con un caudaloso río que lo separaba del bosque, el joven no sabia nadar pero las ganas que tenia de llegar a su destino le dieron fuerzas para seguir y como pudo, poniendo en riesgo su propia vida, pudo cruzar el rio y llegar al bosque. Poco a poco se fue adentrando con gran emoción, se desnudó, quería ser parte del bosque, esperaba que cayera la noche para ver y sentir aquello que vio la noche pasada y entre tanto esperar la noche llegó, pero solo se escuchaban los grillos y las aves nocturnas y muy a lo lejos lobos que le aullaban a la luna, el joven sintió miedo, no había ninguna luz solo penumbras que aletargaban la noche.
[FONT=&quot] Entre tanta desesperación la joven del norte y el joven del sur se encontraron, los dos lloraban entre miedos, decepciones, ahogados en la desesperanza. Aquella noche se hicieron compañía y al amanecer se preguntaban donde estamos, como vinimos a parar aquí, como puede existir un lugar como este y una suave voz le respondió: soy un bosque como ninguno que tienes que aprender a verlo tanto por dentro como lo vez por fuera, si vez lo malo de adentro nunca entenderás la hermosura que vez afuera y aunque no lo creas siempre vivirás buscándome sin encontrarme siquiera. Vayan caminen corran conózcanme por dentro y la belleza que vieron fuera la encontraran dentro de ustedes mismos el día que entiendan mi nombre.
[FONT=&quot] La joven del norte y el joven del sur se quedaron y después de muchos años descubrieron como se llamaba aquel bosque que por fuera es uno y por dentro es otro, después de tantas vivencias descubrieron que aquel bosque se llamaba amor, lo descubrieron en ellos mismos y así aquel bosque sombrío pudieron convertirlo en aquello que ellos veían desde afuera en un hermoso jardín de flores eternas.
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[FONT=&quot] Una historia para mi y para mi esposa que aun vivimos en aquel bosque sombrío buscando la belleza que vivimos y sentimos cuando aun estábamos fuera de el.

 

hermosa historia,hermoso final...el amor depende de los ojos con que lo mires si solo miras el afuera te pierdes la belleza de experimentar el descubrir lo bello que encierra adentro.
un gusto leerte.