La luna y tÚ

Duerme el día y la soledad de la noche dibuja pequeñas sombras sobre el mar.
Dos damas distantes conversan en una terraza junto a la orilla. No pestañean.
De sus miradas brotan y se deslizan por sus mejillas cientos y cientos de palabras .
El viento serpentea a su alrededor formando frases en sus rostros y las lleva de un lado al otro.
No mueven los labios, el mar de fondo se escucha agitado y balancea las sombras.
Una de las damas alarga su mano y mira a la otra. "Espera" lee en sus labios el reflejo del mar, mientras recoge
de entre sus mejillas las últimas palabras y las deposita en la palma de una mano. Coge aire y una ráfaga de viento las hace volar. "Ya puedes irte" se escucha oculta tras una sonrisa.
La otra dama se aleja muy lentamente, sin dejar de mirarse.
Para cuando se dan cuenta, las sombras son barcos que flotan sore el mar, y en el horizonte el sol desayuna un nuevo día.
Y esta noche, volverán a encontrarse. La luna, y quien la necesite.