La niña que brinca la barda amarilla

La niña que brinca la barda amarilla,
la que ríe y canta, la que salta y vuela;
la que se resiste a dejar a su abuela,
será la señorita que surgirá un día
atenta y esbelta, coqueta y bonita,
graciosa y discreta... futura doncella.​

Mientras crece y juega y de amigos se llena
la niña preciosa gravita en su vida
girando y sonriendo, corriendo y gritando…
a todos alegra con sus ocurrencias.
Brillantes ideas, ingenuas palabras,
que brotan de pronto con impertinencia.​

Y en tanto su madre espera el glorioso momento
de ver a su niña trocarse en mujer,
disfruta sus besos, sus manos pequeñas,
sus crédulas frases, y verla dormir
teniendo en su cama sus lindos peluches,
que abraza en silencio, cubiertos... de miel.​

 

¡Quiero volver a ser niña!

Me encantó.

Saludos.

 

Muchisimas gracias cantosirena, me alegra mucho que mis versos te hayan gustado, porque recordar es vivir de nuevo los preciosos momentos que un día disfrutamos con mucha ilusión.

Un fuerte abrazo.