La Pérdida irreparable

De las fronteras devastadas del viejo sueño se cierne la sombra severa de negra muerte.Ésta viene a salvar a la humanidad de una especie de suicidio onírico que la haría caer en trance de eterno sopor metafísico.La noche cae y ya los mortales vigilan desde sus ventanas sucias que impregnan sus destartaladas casas de paja a la luna llena,que ríe sin miramientos hacia la preocupación blasfema que se siente en el aire enrarecido que lo gobierna todo.El sofoco y el calor ahogan las dulces palabras de los niños,antes de decirles el definitivo adiós a sus benévolos padres;cuando van a acostarse a sus camas.Y es que una maldición cayó sobre el poblado.Los progenitores tantean en la obscuridad mientras lloriquean por la pérdida irreparable de sus divinos infantes.Sólo saben rezar,cuando la aurora despunta por el oriente,al Dios misericordioso para que les seque la lengua y así no puedan ya cantar plañideras coplas de fúnebre mortandad en ciernes.

 

Un placer pasar a leer tu magnífica prosa. Saludos cordiales.