La Trágica Declaración

Ya no podía aguantar más, tenía que declararte mi amor y el sinfín de sentimientos que siento hacia tu persona,
espere con ansias el ocaso para que te pueda ver y decirte lo hermosa y fina que eres, llego el momento, vi una rosa en mi jardín llena de espinas y de un color rojo que simboliza pasión, no dude en arrancarle y llevártela.
Caminando aprisa, no dejaba de pensar y sudar al saber tu respuesta, el camino se hacía cada vez más largo, como si el destino no quisiera que vaya a tu encuentro, lo ignore y seguí adelante. En el momento en que te vi, la delgada membrana del silencio se abrió, los gritos mudos se desprendieron y sentí como si me clavaran la espina tan fuerte que duele el solo pensar, mi mano estaba sangrando, tenía las espinas clavadas por la impotencia de saber que estabas con otro, tire la rosa y fugue, con tantas lagrimas en el rostro y una desilusión, ahora se que mi camino solo es el dolor y aun sigo esa recta. ​