La vergüenza del Hombre

La vergüenza del Hombre

Adiós preciosura...

-Hola presumido, ¿quieres que te diga lo qué eres?

¿Muy macho no?, ¿quieres que te cuente tus humillantes secretos?

¿Te auto llamas macho por el hecho de tener dos huevos?

-Hombre soy y los tengo bien puestos.

-Eso no te hace hombre, el hombre es hombre por sus valores.

- a qué te refieres con eso…

- no a nada, solo nombraré tus fantasías y tus bajas presunciones.

¿Presumes ser hombre por tu fortaleza?...

- hombre soy, de los pies a la cabeza.

- jajaja yo te diré tu terrible y vergonzosa realidad.

- jajaja ¿tú a mi?... no me hagas reír, huevón soy desde que nací.

- bueno, ya que tanto hablas de huevos, por ahí comenzaré a degradarte de una vez.

- ¿degradarme? Mmm pues no lo sé.

- ¿dices que eres hombre huevón desde tu concepción?

Si lo eres, porqué tanto lo nombras, como con el temor de que piensen otra cosa.

- Yo, yo… no tengo dudas, lo digo porque lo soy, ¿Qué no?...

- si claro, pues si en verdad lo eres… por qué quieres que los demás lo sepan o se enteren.

- no es que tenga dudas, solo afirmo mi postura.

- si en realidad eres hombre… por qué tienes que demostrarlo. Si eres hombre no tienes que andarlo divulgando, pues a nadie le interesa, si eres hombre de los pies a la cabeza.

- ¿te los enseño?...

- No, no, no… no me enseñes tus vergüenzas. Se ve que te dejó marcada tu niñez, aun te falta madurez.

-¿mi niñez?

- claro desde niño tienes la costumbre de competir, jajaja… compitiendo el que tenga más grande su triste miembro de infante. Jajaja…

- pues no es competir… es simplemente saber quién es más hombre.

- qué vergüenza que creas que el medir tu tamaño es lo que cuenta. Jajaja…

- no me avergüenza, el hombre es hombre por lo que pesa.

- como dice el dicho: dime lo que presumes y te diré lo que te falta.

- No entiendo.

- claro que no entiendes, piensas con los huevos no con la cabeza.

- pues por donde lo veas, también los huevos tienen cabeza jajaja…

- hablas tanto de eso, mejor calla, ahora escucha, descubriré tu gran machismo y tu desventura.


Desde muy niño compites por el dominio del macho alfa, eres un triste mono, un infante sin razonamiento.

Crees qué eres muy hombre por “ser mejor que otros hombre” (en tu mente).

Según tú una mujer no te puede superar, lo dices como si tuvieras miedo o algo tuvieras que ocultar. Tratas de esconder que tu cerebro no es más grande que una nuez.

Pues sabes que una mujer piensa mucho más allá de lo que te puedes imaginar…

No vez más allá de tu nariz, tienes la mirada corta y sin ningún fin.

- Pues yo respeto a la mujer, para mí son damas que no se han de lastimar ni con un pétalo, ¿Cómo la ves?

- ¡Calla! He dicho, eso son simples frases ya quemadas. Eres un machista, escucha de una buena vez.

Crees que por esa frase ya desfasada, ¿se ocultará tu pensamiento?

Fantasioso eres y demás… tu machismo radica en competencia contra los demás.

Te diré lo que son los hombres machistas…

Son hombres inseguros de sí mismos

Vacía está su mente, atrofiada y llena de cinismo.

Lo cierto es que los hombres son rivales entre sí, todos se mienten y se auto engañan.

- Yo vivo mi realidad.

- Escucha déjame hablar, el principal enemigo de los hombres, no son las mujeres, son ustedes mismo, porque para ustedes, las mujeres somos trofeos, pues compiten entre sí, quienes llevan más mujeres en su historial sexual. Pero déjame decirte que eso lo que muestra es: lo fracasado que eres porque no puedes mantener una relación estable.

- ¿y quién quiere casarse?

- claro solo eres un cobarde, porque saber amar no es tener huevos, es tener arte.

Pero lo que no quieres en realidad es que se den cuenta, que no eres estable. Dices que solo utilizas a la mujer. Pues no es que las utilices, es que te dejaron por no poderte establecer.

Los hombres se las creen de muy vivos, mas son como cavernícolas luchando por el dominio. Por el quién es mejor.

Pero la triste realidad es que no saben ni quiénes son.

Hablaré para todos esta vez.


Los hombres son rivales y enemigos e incluso los que se dicen llamar amigos.

- ¿Cómo es eso?

- Pues sencillo… hay hombres que se hacen llamar amigos, pero como son rivales naturales, en realidad son enemigos, por ejemplo; si tu “amigo” tiene una discusión con su pareja, tu tratas de solucionar su relación, según tú… aconsejándola a ella y hablando bien de tu amigo.

- ¡Claro! Donde hay hombres no mueren hombre.

- jajaja… lo que estás haciendo en realidad no es aconsejando a la pareja, porque cascarudo todavía le dices a tu “amigo” déjame yo hablaré con ella. Te acercas hasta donde esta ella y todavía pides la conversación a solas, luego vienes como un lobo rapas, según tú a solucionar, vienes y comienzas a darle la razón a la mujer de tú amigo, le das consejos de cómo debieron de solucionar lo ocurrido, muestras que es falta de comprensión y que no deberían de pelear, claramente lo que estás haciendo es: “me voy a promocionar”.

-¿Cómo promocionar?

- tú en realidad no estás ayudando a tu “amigo”, como son enemigos naturales… lo que estás haciendo es decir que tú eres mejor que él y que si estuviera contigo serias más comprensivo. Que sin vergüenza y todavía se hacen los ingenuos.

- Pues yo no lo veo de esa manera.

- ¡ah no! ¿Y por qué usas palabras suaves y a sus sentimientos quieres llegar? Quieres aprovechar su sensibilidad para que llore y como solo tú estás, esperas que te abrace y desahogue su indignación. Que miseria y que cobarde aprovecharse de esa situación.

No te creas puedo hablar más… puedo descubrir su vanidad. Por ejemplo; cuando en el vecindario vez una mujer, eres el primer portor en darte a conocer, te proclamas lo mejor y se sabe cuál es tu fin (Un trofeo más). Son unos machistas entre ustedes mismos, son como mulos sin entendimiento, pusilánimes cobardes, aprovechados e inestables.

Si vez que la mujer tiene a su novio o su pareja, para ti seria una hazaña inmiscuirte en esa relación, ¡todo un cobarde!, porque lo que quieres proclamar es que tú eres el mejor y que el otro no es más que una apariencia. Presumes en tu bla bla bla… y lueguito si lo logras resulta que solo eran cuentos y demás.


Los hombres presumen de sementales, de los bien dotados y su realidad es superficial.

Entre hombres lo siguiente es su conversar:

Hablan como hicieron su gran hazaña, entre machistas dicen; cuantos orgasmos le distes, a lo que él responde… tres veces o creo que cuatro pero andaba desanimado…

Pero su realidad es que solo fueron tres o cuatro minutos y terminó dormido como bulto.

Cuando un hombre habla de las veces que en una noche estuvo con una chica, el 90% es mentira y el otro 10% es de mucha duda, pero los hombres ya saben este dato, así que entre ellos maquinan su realidad pero son tan cobardes que tienen que seguir la corriente porque también su turno le tocará de echar mentiras y muchos bla bla bla. Pero como son rivales ya cada quien sabe su terrible realidad.

¿Dime ahora eres muy machito?

-Mmm…

- Lo sabia mejor aquí paro, no quiero seguirte humillando. Pero si presumes, seguiré… cuando vea tus comentarios, te responderé.
​

(Douglas Lacayo)

 

Cómo hablan las mujeres...