Las palabras se aprisionan

Las palabras se aprisionan cuando dificultan el paso por tu aliento, sólo el peso de la fatiga, sólo la carga de tu loma desnutre todo alimento que llevado a tu organismo se vacía por falta de dinamismo, son las huellas de un ayer imperfecto, son los pasos de un presente cubiertos de cansancio los que obligan a permanecer inmóvil ante cualquier catástrofe, sólo caminando pendiente de un hilo llegaremos a la meta, no sin antes estar colgados de ese abismo que nos reduce a una mera contemplación de la vida ...,

quédate con la belleza de ese perfecto equilibrio de la naturaleza, sólo piensa que todo son obstáculos y al final de la lucha la recompensa será cogida de buena gana ...,

cuando la existencia se haga exigencia, reduce el ritmo cardiaco, así lograremos continuar a lo largo del sendero que conduce a el resplandor final, que será el mayor regalo de vivir en la incertidumbre, la paz de haber logrado soportar las inclemencias de nuestro tiempo y la serenidad de haber hecho lo que estaba de nuestra mano ...,

no te castigues en el camino, avanza sólo con el ánimo que algún día seremos la felicidad absoluta de haberlo conseguido, entonces nos daremos cuenta que vivir es sobrevivir a los encontronazos de la vida que nos intentan aplastar pero que de nosotros depende el dejarnos avasallar o el avanzar hacia ese lugar paradisiaco en que nuestros sentidos disfrutan del placer de vivir sin lágrimas de angustia, vivir sin sensación de peso, vivir sin esclavizar nuestros sueños.